Jonrón de Darío Smith y Mingo está en la final

Astros sucumbió con tres derrotas al hilo, después de un arranque promisorio

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Por primera vez en muchos años, Darío Smith entonó el clásico olímpico vine, vide, vice (vine, vi y vencí), tal como lo hacía con los uniformes de UIA y Jazz Casino, y con jonrón de dos carreras en la décima entrada propició el pase de Santo Domingo a la serie final del beisbol local, ante la frustración de los Astros, de la constructora Brenes y Salas, los que todo lo tuvieron a su lado desde el principio.

El descomunal batazo de Smith, sobre una recta baja de velocidad del relevista zurdo Lázaro Urroz, no solo rompió el empate sin carreras en episodio extra, sino que impulsó a Santo Domingo a la serie de siete juegos por el título del 2011 contra los Pinoleros, a partir del domingo venidero en el Parque de pelota Antonio Escarré.

Tanto Urroz como el abridor, Nelson Torres, habían sujetado sin carreras a Santo Domingo durante nueve episodios y dos tercios cuando Carlos Artavia disparó hit sencillo al jardín central para darle paso a Darío, quien perdió la pelota sobre el jardín izquierdo en el siguiente envío de Torres.

Ahí empezó la gran fiesta domingueña, la cual se acrecentó en el cierre de la entrada cuando el relevista Mikol Neninger ponchó en sucesión a los tres bateadores siguientes de los Astros para sumar cuatro ponchados en cinco enfrentados como relevo del abridor, Eliseo Moya, quien se despidió de la goma vitoreado por los parciales de Santo Domingo, tras una labor de ocho inings y un tercio, cinco hits permitidos, dos de Erly Zapata.

El descalabro de los Astros se produjo cuando disfrutaban de tres victorias y una derrota y un handicap de diecisiete carreras anotadas y siete permitidas y a solo una victoria del pase a la final. De allí en adelante ganaron un partido 7 a 6 y perdieron tres juegos en fila, incluso el de ayer en el Parque Escarré, dos carreras a cero.

Mingo, que ganó una serie reñida, tiene la oportunidad de sumar cuatro títulos desde 1991 (incluyendo los gallardetes del 2001 y 2008), con el serio compromiso de doblegar cuatro veces a los Pinoleros, vigentes campeones y monarcas de la Copa de la Independencia.