POTCHEFSTROOM, Sudáfrica. (AFP). El centrocampista de la selección española, Andrés Iniesta, volvió a ejercitarse al margen del equipo este viernes, mientras que su compañero Sergio Ramos se quedó en el gimnasio y no participó en el entrenamiento vespertino de la Roja.
Andrés Iniesta salió al terreno de entrenamiento en la North West University de Potchefstroom, a 120 km al sudoeste de Johannesburgo, con el resto de sus compañeros, pero en lugar de realizar los ejercicios con ellos, se dedicó a trotar junto con uno de los preparadores físicos del equipo.
Tras media hora de práctica, Iniesta se retiró al vestuario poco antes que sus compañeros, que se ejercitaron alrededor de tres cuartos de hora.
El centrocampista dio el susto el miércoles en el partido contra Suiza al tener que retirarse tras una entrada de un defensa del conjunto helvético, que hizo temer por una recaída en su lesión en el muslo derecho.
"Ha sido un golpe en el lateral, pero no es nada importante", dijo Iniesta, tras el encuentro.
El jueves, el seleccionador español, Vicente del Bosque, aseguró que el jugador está bien, al igual que su compañero Sergio Ramos, que se quejó de un dolor en las costillas tras una mala caída durante el encuentro disputado en Durban.
El lateral, que el jueves fue sometido a unas pruebas radiológicas que descartaron cualquier lesión ósea en la región dorsal, se quedó en el gimnasio este viernes y no participó en el entrenamiento "por precaución", según uno de los médicos del equipo.
Los dos jugadores "evolucionan bien", añadió el doctor Oscar Celada tras el entrenamiento, en el que Del Bosque, apenas dio pistas sobre el once que se enfrentará a Honduras el próximo lunes.
Los jugadores españoles participaron en un partidillo en el que estuvieron mezclados titulares y suplentes, en el que Fernando Torres, que parece perfilarse como probable titular ante Honduras, formó junto a David Villa, mientras que en el otro equipo, la delantera estaba en manos de Fernando Llorente.
El seleccionador español tiene previsto realizar el sábado un entrenamiento a puerta cerrada, antes de viajar el domingo a Johannesburgo, donde el lunes tendrá lugar un encuentro vital para España en el estadio Soccer City.
España necesita imperiosamente una victoria que le permita mantener sus opciones de pasar a la siguiente fase.