Hace 80 años, en Pocitos, Uruguay se efectuó el primer encuentro de una Copa del Mundo, entre las selecciones de Francia y México.
En aquella ocasión el marcador fue favorable para los franceses al derrotar 4 a 1 al equipo mexicano.
Hoy, a las 12:30 p. m., ambos cuadros reeditarán un capítulo más de aquél memorable partido.
Solamente que en esta ocasión, la batalla es a muerte, ya que una derrota para cualquiera de los dos equipos puede significar la despedida de la Copa Mundial, luego del triunfo ayer de los uruguayos ante los sudafricanos, que obliga más a puntuar a ambas selecciones.
Mexicanos y franceses han cruzado sus caminos en una fase final del Mundial en otras dos ocasiones, en Suiza 1954 (victoria de Francia 3-2) e Inglaterra 1966 (1-1).
En sus seis partidos en toda la historia, los mexicanos nunca han conseguido derrotar a los Bleus, teniéndose que conformar con un único empate y cinco derrotas.
Sus últimos tres duelos se han saldado con victoria europea, por 2-0 en un amistoso en París en 1996, 4-0 en Ulsan (Corea del Sur) en la Copa Confederaciones 2001 y 1-0 en un nuevo duelo de preparación en el Estadio Saint Denis, en 2006.
“México seguirá jugando a lo mismo, es la manera como sabemos jugar. Evidentemente todo sistema y estilo es mejorable. Sobre todo cuando juegas tan agresivo y no tienes premio en los goles, sufres y contra Sudáfrica sufrimos de más", reconoció Javier el Vasco Aguirre, según información brindada por la agencia de noticias AFP.
Para el extécnico del Atlético de Madrid, la duda está en dejar en la banca a Carlos Vela (jugador del Arsenal) o Efraín Juárez y poner en su lugar a Andrés Guardado, del Deportivo La Coruña español.
“México es un muy buen equipo. Cuando juega, cuando acelera, cuando tiene el control del balón puede desestabilizar a cualquier rival”. Sin embargo, “será necesario quitarles ese control para tener una posibilidad de no sufrir”, apuntó el director técnico de los franceses, Raymond Domenech.
La ciudad de Polokwane está ubicada a 1.300 metros sobre el nivel del mar, por lo que las bajas temperaturas que se han dado en Sudáfrica, así como la altura, van a ser un factor que influirá en el cotejo.
México tendrá que luchar contra la historia, el clima y el juego de los galos, si es que quiere tener chance de adueñarse de un boleto a la otra fase en el Grupo A, en el que cerrarán contra Uruguay.