Madrid. EFE El veterano mariscal de campo Brett Favre se presenta una vez más como la figura que puede hacer historia, si durante la segunda semana de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL) consigue llegar a los 500 pases de touchdown con su equipo de los Vikingos de Minnesota.
No lo tendrá nada fácil porque sus rivales serán nada menos que los Delfines de Miami, que la pasada semana demostraron una gran defensa ante los Bills de Buffalo.
Pero Favre, que posee 498 pases de anotación como profesional, la mejor marca de la NFL, también cuenta con la clase y motivación suficiente para recuperarse de la derrota ante los Santos de Nueva Orleans con otro hito histórico en su larga carrera.
Hace 13 años y un día, el pase de anotación número 150 de Favre se registró con el que le dio de dos yardas al receptor Antonio Freeman, en el partido que los Packers de Green Bay, su exequipo, ganó por 23-18 a los Delfines.
Mientras que el corredor estelar Chris Johnson, de Titanes de Tennessee, que en la jornada inaugural de la nueva temporada logró un avance por tierra de 142 yardas, incluido un acarreo de 76 yardas de anotación, se proyecta de nuevo como una de las figuras a seguir cuando su equipo se enfrente a los Acereros de Pittsburgh.
Johnson continúa perfilándose como uno de los mejores de la liga, una estrella en ciernes.