Estados Unidos impuso récord en el 4x400 metros en Mundial de Atletismo bajo techo

Estadounidenses se dejaron el mundial con 8 medallas de oro, y dos de plata y bronce

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Redacción. EFE Estados Unidos pulverizó ayer la plusmarca del relevo 4x400 en el campeonato mundial de atletismo bajo techo , que se desarrolló en Sopot, Polonia.

En la prueba que bajó el telón de la justa de tres días, Kyle Clemons, David Verburg, Kind Butler III y Calvin Smith Jr. emplearon 3 min 2 seg 13 cen, rebanándole 70 centésimas al récord previo, fijado hace 15 años también por un equipo de los Estados Unidos en 1999.

Gran Bretaña se llevó la medalla de plata, en tanto que Jamaica atrapó el bronce.

El de los relevos 4x400 fue el único récord que se rompió en Sopot.

La jamaiquina Shelly-Ann Fraser-Pryce se consagró en los 60 metros femeninos al cronometrar el tiempo más rápido de los últimos cuatro años. Fraser-Pryce lideró de punta a punta con un crono de 6 seg 98 cen. Fue escoltada por la marfileña Murielle Ahoure y la estadounidense Tianna Bartoletta.

La jamaiquina volvió a basar su victoria en una explosiva puesta en acción. No fue la más rápida en los tacos (159 milésimas) pero en el tercer apoyo ya estaba por delante de todas y ya no cedió la delantera.

Fraser-Pryce sumo así su primer oro bajo techo a sus dos títulos olímpicos y cinco al aire libre. Ella, es la actual campeona mundial de 100, 200 y 4x100 metros y dos veces campeona olímpica de 100.

La también jamaiquina Veronica Campbell-Brown era la bicampeona vigente, pero se evidenció que no estaba en su mejor forma tras recibir el visto bueno para competir al umbral de la cita.

Campbell-Brown estuvo involucrada en un escándalo de dopaje que la mantuvo alejada desde mediados del año pasado.

En altura, el catarí Mutaz Essa Barshim compartió con Ivan Ukhov una marca de 2,38 metros pero, además de batir el récord asiático, le ganó al ruso el duelo en la final de altura al superar dicha cuota en su primer intento, mientras su adversario necesitó tres.

Ninguno de los dos pudo con los 2,40 en un concurso que había levantado grandes expectativas ante la posibilidad de que terminara cayendo el viejo récord mundial del cubano Javier Sotomayor (2,43), imbatido durante 25 años.

La etíope Genzebe Dibaba, nueva reina del mediofondo mundial, dominó la final de 3.000 metros con 8:55:04, a 40 segundos de su récord mundial.

Estados Unidos ganador. Los estadounidenses tal como en las tres ediciones anteriores, dominaron en el cuadro de medallas. Estados Unidos conquistó 8 de oro, 2 de plata y 2 de bronce.

Por su parte, Rusia quedó en un distante segundo lugar al conseguir solo 5 medallas, tres de ellas de oro y las restantes de plata.