1 ¿Cómo se sintió en la primera etapa de la expedición?
- Súper contenta y muy bien con las caminatas, porque el trayecto es más fácil. Ahora el ascenso, a partir del Campamento Base, sí tendrá mayores dificultades.
2 ¿Ya el equipo está instalado para el resto de los días?
- Sí, nos instalamos en tiendas de campaña, cada uno con sus cosas. En los días anteriores estábamos en hoteles, teníamos que compartir habitaciones y era más incómodo. Ahora estaremos más tranquilos con todo acá. La empresa encargada de la logística montó un campamento enorme que está aislado del resto de las expediciones, para evitar enfermarnos. Estamos muy bien.
3 ¿Físicamente cómo se siente?
– Muy bien, no tengo agotamiento. Algunos tenemos congestionamiento nasal por estar respirando frío. Es que hasta hoy (domingo) salió el sol, y ya con eso esperamos calentarnos un poco, pero en general estamos bien.
4 ¿Cuál es el plan para arrancar la primera etapa de aclimatación en el Campamento Base?
–Descansar un día y luego iniciar las prácticas del ascenso por la cascada Khumbu (permanece congelada), que se hace con las escaleras metálicas. Eso lo haremos el martes (hoy). Después vamos a escalar el Lobuche Peak (ubicado a 6.120 metros), y nos quedaremos cinco días ahí. Luego vamos a volver al Campamento Base, descansamos y luego realizamos la Ceremonia Puja, que es la actividad en la que le pedimos permiso a la montaña para escalar hacia la cima.
5 ¿Personalmente, cómo se ha sentido en esta, su segunda expedición al Everest?
– Me siento contenta y no estoy ansiosa, estoy disfrutando mucho. Es diferente a la primera porque ya cuando escucho las avalanchas no salgo corriendo a verlas, a pesar de que al llegar al Campamento Base las escuché todo el tiempo. Las escucho y estoy tranquila porque ya viví esto, contrario a muchos del equipo.