Edición 49 de la Vuelta a Costa Rica: un pulso con olor a dominio tico

La Junta y Coopenae son los dos grandes favoritos a dejarse la corona final del giro

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Si las predicciones se cumplen y los primeros análisis son ciertos, la edición 49 de la Vuelta a Costa Rica será un duelo marcado por el empuje local, animado por esa ya declarada rivalidad entre el JPS-Giant y el Coopenae-Movistar-Economy.

Con un representante colombiano que no llega con el cartel de amenaza y solo el ruso Rusvelo como incógnita en cuanto a nivel, las apuestas para el giro tico pasan este año por esos dos conjuntos, ambos con las cartas necesarias para soñar con un triunfo y el aliento de un año cargado de victorias.

Dividida como es tradicional en 12 etapas, la carrera de este año, que iniciará mañana a las 9 a. m. en Limón, con un recorrido de 134 kilómetros, es quizás una de las más planas que se recuerde en la historia reciente de la prueba, una condición que, posiblemente, hará que los interesados en el podio traten de definirla lo antes posible.

También, le dará pie a que países como Guatemala o Cuba hagan su juego en la primera mitad del recorrido, ahí donde se concentra la mayor parte de esas fracciones pensadas para los velocistas.

Escaladores en espera. Aunque la baja montaña aparecerá desde la etapa tres, es previsible que no será hasta por ahí de la seis cuando los escaladores intenten romper con el pelotón, en el primer ascenso de este año, un Alto de Santiago (Cambronero), que si bien nunca ha definido mucho, sin duda puede empezar a sembrar diferencias.

Después de ahí la criticada cronoescalada en Paraíso posiblemente tampoco dicte mucho en cuanto al pulso en el frente de competencia, por lo que todo hace indicar que podría ser el Alto de San Juan en el camino hacia Pérez Zeledón, el que se convierta en uno de esos días claves para la caravana.

La kilométrica contrarreloj en Buenos Aires también podría ser determinante, máxime cuando después de ahí solo quedará el ascenso al Cerro de la Muerte, que el año pasado, por ejemplo, no puso ni quitó a nadie en la tabla.

Eso hace pensar que en el plan de carrera el panorama se pueda aclarar con anticipación, aunque está claro que la carretera siempre tendrá algo qué decir, especialmente, en la esperada Vuelta.