Deporte limonense consternado por accidente de Sherman Guity

Exentrenadores resaltan las cualidades de esta promesa del atletismo

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Limón.

Los compañeros de equipo, los entrenadores y los amigos del velocista Sherman Guity amanecieron hoy aún bajo estado de shock porque todavía no logran sobreponerse al grave accidente de tránsito que sufrió el viernes por la mañana y a raíz del cual perdió de la rodilla para abajo de la pierna izquierda.

"El pueblo limonense amante del atletismo vive unas primeras horas de gran aflicción", expresó Errol Alterno, presidente del Comité Cantonal de Deportes, desde cuya organización el atleta fue su máximo referente en Juegos Deportivos Nacionales de los últimos anos.

Guity, de apenas 20 años, sobrevivió de milagro a una grave colisión cuando, al mando de una motocicleta, chocó contra un autobús cuando regresaba a su casa en Alajuela luego de terminar su entrenamiento en la pista sintética del Estadio Nacional.

La casa de la familia, situada en el barrio Pueblo Nuevo, permanecía ayer sola porque toda la familia se había trasladado hasta San José para acompañar al muchacho.

"Este accidente pone alto a la carrera deportiva, al menos en lo que concierne al más alto rendimiento, de uno de las más promisorios talentos del atletismo costarricense, al punto que estaba llamado a ser el reemplazo de nuestra estrella Nery Brenes", acotó Alterno.

Rogelio Simpson, uno de sus más cercanos entrenadores, recordó ayer que, tras enterarse de la noticia, el dolor que sintió fue tan grande que apenas tuvo fuerzas para encaminarse a su casa, encerrarse y no volver a salir más.

"La horas, se me hicieron eternas. Una y otra vez reflexionando acerca de qué triste final para un atleta con ese horizonte", expresó el veterano entrenador, quien a primera hora, de este sábado, finalmente salió de su casa con la idea de ir a comprar los periódicos para confirmar la veracidad de la información.

Yo me negaba –agregó—a dar por cierta la veracidad de esa información.

A su juicio, Sherman ya había recibido lo que califica como "un primer aviso", dado que hace poco había sufrido un primer accidente con la misma motocicleta.

"Llegó al campo de entrenamiento todo raspado y con problemas en una rodilla a consecuencia de una caída que había tenido. Le increpé duramente y le advertí que un atleta de su condición no podía exponerse, bajo ningún concepto, a un accidente de esa naturaleza, porque su carrera podría correr peligro", expresó Simpson.

Simpson recordó haberle advertido: "Cuídese mucho para que esto no vuelva a repetirse".

El muchacho, agregó, reaccionó de manera positiva y le dijo que se despreocupara, que no iba a volver a ocurrir.

"Yo para ellos soy el viejillo regañón", expuso con cariño.

En igual tono le recriminaba el porqué nunca arrancaba la prueba de los 400 metros con la misma intensidad con que hacía los cierres cuando se acercaba a la curva de los últimos 200 metros.

"Siempre hacía lo mismo. Él comenzaba sin fuerzas pero luego se reponía y terminaba bien. Bueno, ese era su sistema y le funcionaba. Últimamente parecía que cambiaba el estilo, siendo más agresivo al inicio y mejoraba sus tiempos".

Guity había salido recientemente de un problema médico que lo llevó a recibir atención hospitalaria el 11 de agosto debido a una aparente sobrecarga de entrenamiento o, más probablemente, a que antes y luego de las prácticas no se hidrató o se alimentó de la mejor manera.

Así lo expuso Johnny Lester, otro de sus entrenadores cercanos.

"Esto obedeció a la ansias que le ponía a los entrenamientos. Estaba obsesionado por mejorar sus tiempos y con ello tener la opción de llegar a un Campeonato del Mundo para comenzar a brillar en la élite del atletismo global", dijo el técnico.

Leste agregó que Nery Brenes era uno de los que más lo motivaban, al punto de llegar a asegurarle que Guity llegaría a ser mucho mejor que él.

Víctor Hanzel, otro veterano entrenador, explicó que Sherman se preparaba en este momento para enfrentar los Juegos Deportivos Centroamericanos de noviembre en Managua, Nicaragua, de la mejor manera porque, para sus intereses y el de todos los atletas de alto rendimiento, significaba el inicio del ciclo olímpico.

"Los últimos triunfos suyos fueron una doble medalla de oro en 400 metros y el relevo de 4x400 metros durante el Campeonato Centroamericano de Atletismo celebrado hace poco en Honduras", expuso Hanzel, quien aclaró no ser técnico del joven limonense.