El costarricense David Medallita Jiménez se proclamó este jueves campeón latinoamericano del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) de las 112 libras, al vencer al nicaragüense Jerson Ortiz por decisión unánime en una velada realizada en el Hotel Panamá, en Ciudad de Panamá.
Los tres jueces de la reyerta le dieron la victoria al nacional, después de 10 asaltos, con un idéntico puntaje de 98-90. Ahora el pugilista cartaginés tiene un récord de 8 peleas disputadas e igual número de victorias.
El combate fue reñido y en el rostro de David se observó la dureza al sufrir una cortada en la ceja izquierda debido a los golpes de su oponente.
“La verdad estoy muy agradecido con Panamá. La pandemia frenó mi preparación pero siempre seguí entrenando y aquí está la recompensa. Tengo las condiciones para ser campeón mundial y gracias por el apoyo. Jerson es un rival fuerte, tiene golpes potentes, pero pude manejar la pelea y al final me siento orgulloso de tener un título de tanto prestigio”, aseguró Jiménez.
La pelea inició con un Medallita tratando de marcar la diferencia, presionando e intentando mantener la distancia, frente a un adversario valiente, aguerrido, que procuró ir al frente, pero en forma desordenada y lanzando ‘volados’ que él nacional logró esquivar en forma elegante.
El pugilista tico en el segundo episodio se vio sorprendido por Ortiz, por una fuerte derecha, por lo que el réferi le aplicó la cuenta de protección ante un knockdown, lo cual no es una caída definitiva a la lona a causa de un golpe.
No obstante, la acción fue un aviso para el pugilista costarricense, quien salió decidido en los siguientes asaltos a recuperar la ventaja en las tarjetas de los jueces.
Con una mayor técnica y velocidad, junto a una mejor condición física, el tico poco a poco fue imponiendo sus condiciones frente a un pinolero que no dejó de luchar e intentó tomar ventaja de su mayor alcance para mantener a distancia.
No obstante, las mejores combinaciones del brumoso hicieron mella en su adversario que al final en forma desordenada intentó sorprender al costarricense, quien con todo merecimiento se dejó el título latino, su primero como profesional después de 375 días de espera, luego de su último combate.