Rustenburgo, Sudáfrica (AFP). El entrenador de Estados Unidos, Bob Bradley, reconoció este sábado, tras la derrota de su combinado ante Ghana por 2-1 en octavos de final del Mundial, que a sus pupilos les "faltó algo" para poder clasificarse para cuartos de final.
"Mostramos nuestra calidad en la fase de grupos. Teníamos el sentimiento de que teníamos lo que hacía falta para continuar y para ponernos a prueba al más alto nivel. Pero faltó algo. Nuestros centros no fueron tan buenos como debieran", dijo Bradley, antes de aludir a la "fuerza" del combinado ghanés.
"No estábamos frescos, contra toda esa fuerza de Ghana", declaró el técnico estadounidense, señalando una de las causas de la derrota de sus hombres.
"Estoy decepcionado. Sabíamos que Ghana era un buen equipo. (Asamoah) Gyan creó peligro, físicamente es muy fuerte", agregó aludiendo al delantero ghanés, que decidió el choque del lado de los africanos, que lograron clasificarse para los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica.
Para Bradley, una de las claves que lastró el rendimiento de su equipo fue recibir un gol muy pronto y tener que hacer frente a esa desventaja.
"Recibimos un gol muy rápido pero cuando igualamos tuvimos ocasiones para matar el partido. Estábamos bien físicamente. Pero ir en desventaja resta mucha energía. Nos complicamos", afirmó antes de pronunciarse sobre el Uruguay-Ghana de cuartos de final.
Ghana "es un equipo con talento, su entrenador Milovan Rajevac está muy bien organizado", señaló sobre su homólogo, natural de Serbia.
"Contra Uruguay, será duro pero los ghaneses son evidentemente capaces de clasificarse", estimó de cara al choque que tendrá lugar el viernes en Johannesburgo.