Atletas fueron a compartir en familia y amigos

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El Maratón de Relevos sirvió para compartir entre familia y amigos una mañana diferente en los alrededores de La Sabana.

Los integrantes de equipos gozaban, se entretenían y esperaban su turno sentados en la pista del Estadio Nacional.

Para muchos lo importante no era ganar, sino completar el recorrido y formar parte del evento.

Sin ser una carrera tan competitiva, el ambiente también se tornó armonioso y cada quien apoyaba con gritos de aliento a los que salían a enfrentar al recorrido de siete kilómetros.

El corredor Óscar Molina del grupo Demasa-Tosty fue el primero en salir en relevo y luego fue esperado por sus compañeros de trabajo para felicitarlo.

“Nosotros decidimos organizarnos para competir hoy (ayer). Me parece que el recorrido con la naturaleza fue muy bonito y la carrera era corta y muy rápida.

“Tratamos de entrenar porque nos gusta mucho, pero claro, uno lo toma como hobby y también como deporte”, apuntó Molina al cruzar la meta.

Otro de los grupos de amigos que se hicieron presentes fue Begushi, quienes entrenan juntos por recreación y deporte.

“Entrenamos constantemente y estamos en un buen nivel. Nos dimos cuenta de que no venía mucho élite, así que sabíamos que podíamos dar la pelea”, dijo Misael Maleaño, integrante del equipo.

Por su parte Geanina Mena, una de las jóvenes promesas del atletismo, dejó las carreras más competitivas por un día para participar del relevo.

“Mi caso es muy particular, ya que toda mi familia corre. Entonces decidimos venir. Lo hacemos un poco más ameno y no tan competitivo, pero estuvo muy bonito.

“Siento que siempre hay que dedicarle un tiempo a la familia y como en nuestro caso a todos nos gusta correr, era el momento oportuno para compartir y así tener una relación más bonita. La familia primero; no hay nada más importante”, firmó la joven.

Al igual que Mena, muchos deportistas tomaron La Sabana como recreación y con su medalla en mano se fueron satisfechos con su participación.