Astros Brenes y Salas consiguió ayer su boleto a la final del beisbol nacional, gracias a las dos victorias que logró ante Tiburones, 6-5 y 13-3, en el diamante seis de La Sabana, mientras que Liceo de Costa Rica quedó a un juego de ser su rival en la serie por el cetro criollo.
En el primer juego, Astros salió airoso con dos racimos de tres carreras y doblegó a los escualos 6-5.
Los hermanos Leonardo, Alonso y Óscar Reyes fueron verdaderos baluartes y contribuyeron ayer con las tres primeras carreras de Brenes y Salas durante el primer partido, sin demérito de un extrabase de Elpidio Serrano.
En el segundo racimo de tres carreras de Brenes y Salas, los honores fueron para Aaron Arbizú y Léster Niño, con sendos dobletes.
La victoria los motivó y decidieron ir con todo al siguiente juego para ratificar la clasificación.
Para el segundo cotejo, un jonrón con bases llenas del dominicano Serrano y vuelacercas solitario de Arbizú coronaron la victoria de Astros por nocaut de 13-3 sobre los escualos y su boleto a la final.
El derecho Eliseo Moya despertó en el momento preciso con juego completo a favor de Brenes y Salas, con solo siete hits en contra, dos de Osmín Rostrán y cinco ponches propinados en el cotejo.
Escollo. El posible rival de Astros en la gran final podría ser el Liceo de Costa Rica. La novena liceísta inclinó ayer la balanza a su favor 3-2, en la serie, con un contundente triunfo de 20-5, gracias a un nocaut con tan solo seis episodios.
Liceo acudió, una vez más, a Juan Barrera para afianzar la victoria contra los florenses.
Barrera lanzó el juego completo y tuvo el auxilio de un jonrón de tres carreras de Rubén Valverde, quien envió la pelota a las cercanías del Estadio Nacional tras sobrepasar la reacción de los rivales por el jardín derecho.
También sobresalieron los jonrones, con bases llenas, de Ramón Flores, su noveno del año, y otro similar de Ramón Valladares que terminaron por liquidar la endeble resistencia de Heredia.
El próximo domingo 17 de junio será un día clave, ya que se estará definiendo al segundo finalista.
A las 9 a. m. Heredia llega con la obligación de triunfar para igualar la serie y forzar a un sétimo y definitivo juego, mientras que los académicos tendrán que ir a todo o nada en procura de definir la serie de una vez por todas.
En caso de que Liceo no pueda cumplir su objetivo de liquidar la serie, se determinó que ambas novenas jugarán a las 12 mediodía, en el diamante número seis de La Sabana, el sétimo partido.
La gran final está programada para el que gane 4 de 7 juegos y se iniciará dentro de 15 días.