Dicen que lo que se hereda no se hurta: como le sucede a su mamá cuando ella pelea, a Hanna Gabriel la batieron las emociones y no le quedó más remedio que llorar.
Un queque de cumpleaños –mañana llega a sus 28– le mandó a la lona la resistencia a las lágrimas.
Las había vencido durante muchos minutos, mientras repartía agradecimientos aquí y allá..., pero el queque y el mariachi (con El Son de la Negra y el Cumpleaños Feliz) tumbaron a la campeona mundial.
Hanna Gabriel regresó ayer por la mañana al país, luego de retener la corona superwelter de la Organización Mundial (OMB), el domingo pasado, ante la estadounidense Melisenda Pérez.
“Fue muy dura, ella hizo una pelea digna de campeonato mundial. Me enseñó que uno debe ser muy cuidadoso y que las apariencias engañan”, comentó la pegadora acerca de su rival del domingo, quien resultó más incómoda de lo que parecía al primer vistazo.
La costarricense batalló durante 10 asaltos –el límite de la pelea– para dar cuenta de su adversaria por nocaut técnico, en el combate de semifondo de la velada de guantes celebrada en Punta del Este, Uruguay.
“Trató de que yo perdiera la calma, de sacarme de mis casillas. Me dio bastante problemas; pero esto me gusta, porque así puedo aprender a hacer un mejor trabajo”, aseveró la pugilista.
En esa misma cartelera peleó Bryan Tiquito Vásquez, quien venció al argentino Luis Juárez por decisión en seis asaltos.
Yerros. En la conferencia de prensa –realizada en las instalaciones del bingo Multicolor, en la avenida Central– Hanna admitió que cometió muchos errores ante Pérez.
De hecho, eso le costó una “jalada de aire” por parte de su entrenador, Ezequiel Obando, en el descanso entre los rounds ocho y nueve.
“Todavía no hemos visto el vídeo de la pelea. Hoy (ayer) por la noche lo vamos a ver para empezar a corregir los errores”, aseguró Obando, quien agregó que el martes regresan a las prácticas.
“Ayer (el martes) corrimos un poco”, añadió.
Con la corona en sus sienes, el tema de la siguiente defensa surgió como tema obligado y con una pregunta ingambeteable: ¿será en Costa Rica?
El asunto pasa por lo económico, en primera instancia, y por el apoyo del público de Costa Rica, en segunda.
“Nosotros tenemos un año de intentar montar esta pelea acá. No solo queremos una pelea, queremos varias”, comentó Kathy Cunningham, prima y manager de la campeona del mundo. Indicó que los mensajes de texto al 4460 (un costo de ¢500) son una forma de apoyo.
Mas no se trata de una sola pelea: se debe montar una cartelera completa.
Ya habrá tiempo para ello; por lo pronto, Hanna recibió ayer muestras de cariño como la de Mario Rojas, Juanito, quien le recitó un poema de su autoría apenas la campeona salió del Santamaría.