Sabanilla, Alajuela. Roberto Muflitas Castro se adjudicó los dos heats de la fecha final del Campeonato Nacional de Motocross, disputados ayer, lo que le valió para proclamarse como el nuevo monarca de la categoría MX 1.
Con los 50 puntos ganados en ambas largadas, Castro llegó a 366 en la tabla general, mientras que Johan Cebollerito Mora, quien inició la contienda como líder y principal favorito a revalidar el título, sumó 44. En la clasificación global quedó con 361.
Mora punteó el torneo desde el comienzo, mas en la hora decisiva cedió y permitió que su rival se consagrara con los máximos honores.
Incluso antes de la doble jornada de este fin de semana, Cebollerito contaba con cuatro puntos más que Muflitas en la general, por lo que la presión recaía en Castro.
Pero el nuevo campeón no tuvo la preparación deseada para una competencia vital como la que se disputó ayer en la Pista La Olla, en Sabanilla de Alajuela.
Muflitas apenas arribó al país el viernes anterior procedente de Colombia, donde había ganado el Campeonato Latinoamericano.
Allá fue víctima de un robo y todo su itinerario sufrió una variación que puso en riesgo su participación en las mangas de este fin de semana.
Incontrolable. Roberto Castro olvidó todos esos pesares cuando saltó a escena, pues solo fue necesario el banderazo de salida para tomar una ventaja que se hizo imposible para Johan Mora.
El ritmo casi endemoniado que llevaba no dio lugar para pensar en que el hasta entonces líder general pudiera rebasarlo.
Cada curva, cada salto y cada aterrizaje fue calculado por Castro con una soberbia maestría, algo que ayudó para que con el pasar de los minutos de cada uno de los heats , se ampliara la brecha que mantenía con el Cebollerito.
Este último se supo vencido cuando el tiempo de diferencia superaba los 10 segundos: solo una caída estrepitosa de Castro podía modificar el escenario.
Mas la desgracia no sucedió para Muflitas y con una espectacular cosecha en las últimas tres largadas del campeonato completó una remontada que le permitió alzar su decimocuarto título nacional.
Dicho esfuerzo se coronó con una bulliciosa ovación por parte de los miles de aficionados presentes en la pista alajuelense.
Una devoción digna para un campeón que supo levantarse de todas las adversidades.