Tener a Emilio Milo Valverde al volante de un bólido es casi sinónimo de triunfo, al ser uno de los pilotos más ganadores de la región.
Cuando resta una fecha para concluir el Campeonato Panameño de automovilismo, el costarricense se adjudicó, la semana pasada el cetro de ese país, en la categoría GT, logrando su cetro número 11 en cuatro diferentes países, tras coronarse en circuitos de Costa Rica, Guatemala y República Dominicana.
Valverde, quien forma parte del equipo CHM Motorsport, gestó su triunfo ganando la pole position para redondear un excelente año, su novena primera posición en forma consecutiva, tras triunfar en cinco clasificaciones del Costa Rica Touring Car Championship (CTCC) y cuatro en Panamá.
En Costa Rica, Milo ha conquistado ocho títulos en las modalidades de GT1 y Súper Turismo; en Guatemala, uno GT1 en 2008, y en Dominicana, fue campeón en 2016 y subcampeón en 2015 y 2016. A ello se deben sumar dos cetros en la modalidad de rali en nuestro país.
“La verdad, estoy muy contento y orgulloso por alcanzar el campeonato en Panamá. Aquí es donde se valora el sacrificio y el esfuerzo durante toda la temporada, así como el trabajo del equipo, que siempre tuvo a punto el carro para tenerlo competitivo y pelear los primeros lugares. Esas fueron las claves del éxito”, aseguró Valverde.
Competir en un vehículo sumamente duro por la potencia que posee el GT1, con temperaturas que rondan los 65 grados centígrados, en una pista muy caliente, requiere una muy buena condición física, situación en la que trabajó Milo durante la campaña, pues además del campeonato panameño, debía disputar el CTCC en Costa Rica, el cual peleó hasta la última fecha (finalizó tercero).
El experimentado piloto considera que la continuidad y la frecuencia de carreras le permiten ser competitivo, tal y como lo ha demostrado durante la temporada 2018.
“Sin duda la constancia está acompañada de buenos resultados. Cabe resaltar que no ha sido sencillo, porque muchas veces cuando competimos fuera del país hemos tenido que viajar dos o tres días antes de la competencia, para participar en las prácticas, las clasificaciones y la carrera, por lo que hubo que adaptarse muy rápido al vehículo y a las condiciones de la pista”, afirmó Valverde.
El haber ganado en el extranjero es sin duda reflejo de su control del volante y sagacidad en la pista; no obstante, está lejos de considerarse el mejor conductor o referente para las nuevas generaciones.
“No sabría decir si soy referente a nivel nacional; eso tendrían que decirlo los otros pilotos. De momento, hemos competido en todo Centroamérica, Colombia, Venezuela, Puerto Rico, México y Estados Unidos con buenos resultados. Quizás nos ha faltado competir en Europa, pero tampoco es algo que me desvela porque hasta el momento hemos logrado los objetivos que nos planteamos”, añadió Valverde.