Los Ángeles. Los Angeles Clippers vivieron la noche más gloriosa de su historia y eliminaron a los vigentes campeones de la NBA, los San Antonio Spurs, en un sétimo partido (111-109) que pasará a los anales como el día en que el “vecino pobre” de la ciudad californiana se confirmó como gran aspirante al título.
Una penetración mágica de Chris Paul a falta de un segundo dictó sentencia en un partido increíblemente luchado que vio 31 cambios de líder y 16 empates.
Los Clippers se clasificaron para las semifinales del Oeste y se medirán a partir del lunes a los Houston Rockets. Paul, jugando casi todo el encuentro lesionado, acabó con 27 puntos y 6 asistencias, en tanto que Blake Griffin aportó 24 tantos, 13 rebotes y 10 asistencias.
El legendario Tim Duncan hizo 27 puntos y 11 rebotes. Tony Parker agregó 20 tantos y 5 asistencias. El argentino Manu Ginóbili añadió 8 puntos y 7 asistencias en 19 minutos y el brasileño Tiago Splitter 5 puntos y 3 rebotes en 22 minutos.
Los Spurs se quedan con una marca de 1-4 en sétimos partidos disputados a domicilio.
Al último periodo se llegó 79-78 y comenzó con un intercambio de cañonazos con la firma de Patty Mills, Ginóbili y el propio Paul.
No pudo haber más igualdad de ahí al final. Green dio 4 de ventaja a los Spurs (91-95) , pero los angelinos reaccionaron y dos triples de JJ Redick dieron la vuelta (100-99).
Paul puso dos arriba desde la personal a los suyos (109-107) a falta de 13,3 segundos. Duncan sacó otra falta y no falló desde el tiro libre (109-109) . Al final, con 8,8 segundos en el reloj, Paul penetró y el balón cayó de forma celestial en la red.