El defensor costarricense Giancarlo González vivió una dura experiencia este domingo, al ver como su equipo, el Palermo, descendió a la Serie B.
Pipo salió como titular en la visita al Chievo y actuó 86 minutos en un juego muy complicado para los rossoneros.
Al tico lo amonestaron en el 41' y las cosas se le pusieron cuesta arriba al Palermo en el 67', cuando el Chievo Verona abrió la cuenta con un penal marcado por Sergio Pellissier.
González fue la última variante de Diego Bortoluzzi y cuando el tico le cedió su lugar al italiano Simone Lo Faso, su escuadra caía 1-0.
Dos minutos después, Edoardo Goldaniga descontó, pero ya se había acabado el tiempo como para una reacción positiva.
Y no había marcha atrás.
Después de una temporada muy irregular, este empate a un gol no le alcanzó al club del seleccionado nacional y su sentencia es convertirse en el segundo equipo de la primera división italiana que pierde la categoría, luego de que ya se había consumado el descenso del Pescara.
A pesar de que aún restan nueve puntos por disputarse en la Serie A, al Palermo del Pipo ya no le dan los números para mantener la categoría.
Y en parte, este descenso es consecuencia de la inestabilidad en el banquillo, porque el club siciliano cambió doce veces de entrenador en dos temporadas. Inclusive, ha tenido cuatro estrategas en el último año.
Tras 35 partidos, Palermo es penúltimo, con 20 puntos.
De esos 35 duelos, Giancarlo González estuvo presente en 18 partidos y jugó un total de 1.473 minutos.
En la temporada, los rossoneros solo han ganado cuatro juegos.
También empataron ocho duelos y coleccionan un saldo desfavorable de 23 derrotas.