Keylor Navas pasó de ser noticia por su posible salida del Real Madrid a estar a un partido de conquistar su primer cetro de la Liga española.
El tico ha sido punto alto de los blancos, que solo necesitan un empate ante el Málaga, el próximo domingo, para levantar el trofeo de campeón.
Diferente a como inició esta temporada, el portero costarricense ahora es un muro para el Madrid.
La historia cambió para el tico en el último tramo de la campaña, en la que ha mostrado que sea poco o mucho, tapa la mayoría de aproximaciones que lo amenazan.
El nacional sigue recibiendo goles en casi todos los juegos, pero sus paradas impiden que sean más las anotaciones encajadas por el equipo merengue.
Su nivel empezó a tomar forma en abril, pese a que sucedió en la derrota (3-2) ante el Barcelona.
Navas no pudo evitar la caída, pero sí protagonizó al menos tres tapadas que mantuvieron vivo al Real durante el cotejo.
Mientras tanto, en Champions League ha tenido apariciones determinantes, ejemplo claro los dos juegos ante el Atlético de Madrid, que a la postre le dieron el pase a la final a los blancos.
Desde ese 23 de abril en el Camp Nou, Navas tomó más confianza y este miércoles lo demostró en la victoria sobre el Celta de Vigo (1-4), negando el tanto a los gallegos en dos oportunidades muy claras.
En el minuto 31 despejó un tiro libre directo de Daniel Wass y en la segunda parte, cuando el partido estaba 2-0 a favor de su club, volvió a rechazar un disparo del danés, esta vez dentro del área.
Aunque su rival de turno generó más peligro que esos dos remates, fue ahí cuando el generaleño tuvo máxima exigencia y respondió.
El diario As de España lo volvió a destacar en su análisis del juego: "Buen partido del costarricense, que alarga su gran momento de forma".
Esa actuación se da en su triunfo 50 con los merengues, según destacó el sitio oficial del Real Madrid.