Alajuela.
A nivel de afición y de prensa, durante muchos años se debatía quién era mejor, si Wílmer López o Wálter Centeno.
Hoy, eso todavía puede ser un largo tema de discusión y la huella de ambos continúa, ya no como jugadores, sino como técnicos.
El domingo, a las 11 a. m., Alajuelense recibirá a Grecia en la gramilla híbrida del Morera Soto.
Ahí se reencontrarán el Pato y el Paté, pero esta vez como rivales desde el banquillo.
"Todas las veces que estuvimos juntos en Selección nos llevamos bien y después cuando jugamos en contra, cada quien defendía lo de su conveniencia, sus colores, pero nunca tuvimos un roce o un choque que complicara alguna situación; nunca, nunca, más bien nos llevamos bastante bien", manifestó López en charla con La Nación.
Desde que el Pato asumió la dirección técnica de los rojinegros en sustitución de Benito Floro, hace siete juegos, Alajuelense contabiliza tres triunfos y cuatro empates.
Con Paté, Grecia acumula en cinco victorias, tres empates y tres pérdidas en 11 jornadas.
-- Siempre los comparaban por el puesto que tenían, en el medio campo, ¿había rivalidad?
Eso fue más la prensa, la que quiso hacer ese tipo de comparación o de competencia entre él y mi persona, pero al final terminamos jugando juntos en la Selección, fueron muchos partidos, hasta el Mundial (Corea-Japón 2002) lo jugamos juntos y yo creo que al final la competencia no era mía contra él ni él contra mí, era contra todos.
"Contrario a lo que la gente piensa, Wálter Centeno y yo nos llevamos bastante bien".
-- ¿Cómo analiza lo que ha sido esta faceta de Paté como técnico?
Yo creo que Grecia es un equipo que ha animado mucho el campeonato, por la propuesta de fútbol que Wálter ha querido proponer durante todo este torneo, le está dando sus frutos, porque en este momento está metido entre los cuatro clasificados.
"Si usted tiene una propuesta y las cosas marchan bien, no tiene por qué cambiar. Yo creo que es la característica, es lo que a él le gusta y los jugadores lo han entendido bastante bien y están en una posición bastante buena".
-- ¿Cómo era Wálter Centeno como jugador y qué virtud de él le hubiera gustado tener?
Cosas que uno le reconoce, y en lo que era un ejemplo, es que como jugador siempre se entrenó muy bien, fuera lo que fuera que se hiciera en la semana o en cualquier trabajo técnico, táctico o físico, de gimnasio o lo que sea, siempre lo hacía al 100%, es una persona que siempre daba lo mejor y eso lo llevó a ser la figura que fue a nivel nacional.
-- ¿Qué partido se espera para el domingo?
Es bonito, está bonito el partido, pero tanto Wálter como yo, más de lo que uno pueda medio orientar a los jugadores fuera de la cancha en el sentido de darle alguna situación equis, después de ahí en el terreno de juego no podemos solucionar mucha cosa.
"Ahí les corresponde a los jugadores que son los protagonistas, los que tienen que dar lo mejor de sí en todo el sentido para sacar los tres puntos".
-- En este rol de técnico se ha ido encontrando con amigos y rivales que han sido leyendas, ¿qué le deja esta faceta?
Son personas que uno aprecia mucho, con quienes compartí durante mucho tiempo y con quienes después de haberme retirado, he tenido una buena relación, como Javier Delgado, ahora viene Wálter, pero también podemos hablar de Vinicio Alvarado que ahora está en Liberia.
"Uno los aprecia y yo siento que son cosas bonitas, agradables, que después de ser compañeros o estar de rivales dentro de un terreno de juego, nos vemos las caras en una posición diferente donde estamos muy limitados, porque más de lo que uno puede hablar en el camerino, en la pizarra y un cambio que uno pueda hacer, hasta ahí llega uno".
"Ya en la cancha a los que les toca producir es a los jugadores. Espero un buen partido el domingo y nosotros tenemos que hacernos sentir en nuestra casa".