¿Cómo llega el equipo en ritmo y por el trabajo acumulado de la semana?
Siempre les he dicho que nosotros somos un equipo de trabajo con una idea de juego definida, cuando tenemos una semana larga abarcamos muchas cosas de nuestro sistema y nos ayuda para tener a nuestro jugadores bien afinados, estos diez días nos cayeron a la perfección, los muchachos hicieron trabajos que tenían que hacer y estamos listo para mañana, esperando que las cosas salgan como lo hemos trabajado.
¿Cómo ve el rival? ¿Siente que hay más presión de lo normal?
Somos conscientes de eso, jugamos contra el primero de su grupo en la liga de Honduras, tiene muy buenos jugadores, dos defensas centrales grandes que marcan bien, dos centros delanteros que se saben el juego, por las bandas tienen cosas importantes. Cuando venimos aquí a Honduras no son fáciles los partidos y el de mañana no será la excepción. Tenemos que hacer muchas cosas si queremos ganar el partido.
¿Cuánto le satisface tener el plantel completo? ¿Le pidió consejos a Esteban Espíndola?
Por dicha tenemos a todos, incluyendo a Esteban, contento de que vuelva a estar listo, es un jugador en el cual tenemos toda la confianza, en cualquier momento puede ayudarnos mucho, hablamos mucho con él, nos dio muchas referencias de su exequipo, consciente de todas las cosas que nos dijo. Nosotros como cuerpo técnico hacerle caso y esperemos que mañana resulte todo lo que nos dijo.
¿Le trae recuerdos venir a enfrentar este juego en Tegucigalpa?
Como jugador también tuve lindos recuerdos, hace un año ganamos acá, pero hoy las cosas son diferentes, es otro rival, otra perspectiva del juego. Estamos conscientes de la responsabilidad y de que tenemos que hacer cosas importantes para ganar a uno de los mejores equipos acá en los últimos tiempos.
Al ser un partido único ¿qué cambia jugando como visitante en este estadio?
Cero errores, mucha concentración, un despiste te puede dejar fuera, tienes que estar en plena concentración durante todo el partido, no dando ventajas al rival porque no hay mañana. La clave es cero errores.
¿Qué opinión le merece tener que ser visitante en esta serie?
El torneo es así, nos tocó venir acá, nosotros queríamos jugar en nuestro estadio, pero ser campeón no alcanzó. Ahora debemos escribir una nueva historia y se empieza mañana, a partir de mañana podemos tener más facilidad de jugar en nuestro país la final o semifinales. Si querés lograr algo debe haber adversidad. Sabemos cómo está la cancha, es de pasto complicado, lento, diferente a la de San Pedro Sula, que es más rápida, pero los que hemos jugado sabemos cómo tenemos que interpretar la forma, la gran mayoría ya jugó aquí, esperemos no sea ninguna excusa.
¿Cómo vivía usted estos partidos de eliminación directa y cómo los vive ahora?
Como jugador siempre cuando tenía retos de esta magnitud trataba de estar muy concentrado, cuidar detalles, estudiar al rival, hablarle a la mente, y ahora como entrenador también estar aislado, concentrado, vivir el partido, saber lo que debo hacer si pasa tal cosa... Le doy mucha vuelta al partido, este partido lo he jugado varias veces en mi cabeza, lo más importante es lo que ellos hagan, la mente de ellos es lo que me quita el sueño para que lleguen bien. También respaldado del trabajo que hemos hecho, es un equipo de cuatro torneos al lado mío y hemos hecho muchas cosas importantes, pero nos falta mucho por recorrer, es un grupo con mucha hambre.
¿Siente que es ventaja el traslado de partido a Tegucigalpa por el tema de clima?
Sabemos que en la cancha de San Pedro Sula la humedad es factor determinante, aquí en Tegucigalpa no hay tanta humedad, es más frío. La cancha puede ser que no esté en óptimas condiciones, pero esto no nos tiene que sacar del enfoque que es ganar el partido, nosotros queremos trascender y para eso tenemos que superar estas cosas.
¿Se sienten obligados por ser los campeones?
A lo largo de la historia a Saprissa siempre se le exige lo mejor, los jugadores están anuentes a todas esas cosas, viven y conviven con esas presiones, para nosotros una vez que salimos a la cancha hay presión de ganar, tenemos que seguir viviendo con esa tradición.