Liberia. La velocidad de Liberia fue el arma para destrozar al Santos. El cuadro pampero triunfó 3 a 0 sobre los caribeños y demostró su poderío como local.
El conjunto dirigido por Gustavo Martínez hizo transiciones rápidas, marcó con pundonor y no perdonó frente al marco del meta Marco Madrigal.
El partido tuvo un solo dueño al punto que los liberianos se apoderaron del marcador desde el minuto 7.
El artillero Irving Huertas tomó la pelota luego de una salida rápida por el sector derecho, el delantero quitó dos marcas y remató desde fuera del área, la pelota se coló en el ángulo derecho del portero rival.
Con la ventaja a su favor, el equipo local no bajó el ritmo y por el contrario intentó aumentar la ventaja lo antes posible.
Por su parte, Santos buscó el empate pero con desorden y sin ideas. La creatividad que aportó Kenneth Cerdas en las primeras fechas quedó como un recuerdo, ya que el volante al menos ayer no mostró su mejor versión.
Al 51’ de juego nuevamente una escapada por derecha, pero en esta ocasión de Wálter Chévez, puso a los liberianos a celebrar. Chévez ganó la línea de fondo, centró y Huertas de palomita colocó la segunda diana.
El partido daba la impresión de estar definido, ya que los guapileños no encontraban ideas y los guanacastecos mostraban orden en defensa.
El cuadro aurinegro continuó con buen ritmo y al 57’ consiguió un lanzamiento de penal, el cual Wálter Chévez canjeó por gol.
Liberia le pasó por encima a un Santos que nunca se encontró ni dio la talla.
“Este es un grupo bravo, un equipo que quiere crecer y que tiene cosas muy buenas. Siento que podemos mejorarlo, pero ya vemos cosas muy buenas. Nosotros estamos apuntando a lo más alto y tras eso vamos”, afirmó Gustavo Martínez, quien fue nombrado hace tres días como entrenador liberiano.