Una lección a la indiferencia: futbolistas de Saprissa idearon su mensaje más importante

Los últimos casos de violencia han impactado al país y las mujeres del equipo morado sintieron una responsabilidad

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Desde el 13 de setiembre anterior el Saprissa Femenino empezó una campaña llamada #NiUnaMenos. Desde entonces, en cada partido la capitana de las moradas lleva una camisa negra con la foto de alguna de las mujeres costarricenses víctimas de feminicidio.

Además, otras jugadoras portan una camisa blanca con la leyenda Ni Una Menos Costa Rica. Los últimos casos de violencia han impactado al país y las mujeres del equipo morado sintieron una responsabilidad.

La idea nació en lo interno del camerino, conversando sobre las recientes víctimas, sobre todo conmocionadas por el caso de Allison Bonilla, quien fue asesinada y lanzada a un botadero clandestino de San Jerónimo de Cachí, en Paraíso, Cartago.

“Ya veníamos de tiempo atrás viendo estas situaciones, pero lo de Allison nos afectó muchísimo porque tenemos una chica de esa zona, de lugares que uno considera tranquilos, en teoría”, comentó la entrenadora Karol Robles.

“Son muchas cosas las que han pasado. Hace más de un año, para el Día de la Mujer, se hizo una campaña llamada lo que no se nombra no existe, era sobre la visibilización, y generamos una disconformidad, llamamos la atención en la gente, dio muchos frutos. Siempre que tengamos esa oportunidad, lo haremos”.

En un momento en que el fútbol femenino tiene más presencia en los medios de comunicación, la afición está más pendiente y las jugadoras poseen más alcance entre la población, en Saprissa sintieron el llamado a hacer consciencia desde su plataforma.

Por eso, en medio de la indignación, tristeza o inseguridad, entre todas idearon darle cara y voz a esas víctimas.

“Creemos que tenemos esa responsabilidad: todos los fines nos pasan por televisión, tenemos el micrófono al alcance y sabemos que es un problema país. Es empezar a cambiar la cultura, tener cualquier tipo de cambio, eliminar micromachismos de nuestra sociedad; hacer algo, porque eso es lo más grave: vemos las cosas y volteamos la cara. Nosotras quisimos decir, lo vimos, lo sentimos y queremos que cambie, levantar la mano y decir aquí estamos. Ese fue nuestro impulso y por lo que iniciamos”, explicó la estratega tibaseña.

Hasta ahora han sido siete partidos haciendo lo mismo. La primera vez fue el 13 de setiembre en un compromiso ante Herediano, cuando Katherine Alvarado llevó el nombre e imagen de Natalia, amiga de su infancia, quien fue asesinada a los 28 años.

“Nos criamos juntas, fuimos compañeras, amigas, y lastimosamente ella fue víctima de una forma muy cruel. Son cosas que duelen. A ella la conocí por muchos años, es un caso que me ha afectado. Tener el apoyo de Saprissa es importante para nosotras, es lo menos que podemos hacer como institución; el equipo femenino alza la voz por ellas y sus familias”, comentó en ese momento la volante.

Saber que hoy pueden ser ellas o sus familiares también hizo reflexionar al conjunto morado. Alvarado ya lo vivió de cerca.

“Muchas chicas entrenamos a las 5:30 de la mañana, algunas salen de sus casas cuando todavía está oscuro o van y estudian tarde, como lo hizo Allison en la noche. Es algo del día a día de miles de mujeres en el país y saber que están corriendo un peligro, con una muerte tan trágica, nos llegó".