La curva de rendimiento es clara: Saprissa llega con altibajos, mientras Alajuelense tiene un rendimiento sólido para afrontar hoy el partido de vuelta de las semifinales del Verano 2015.
Los manudos tienen cuatro encuentros que los respaldan, en los que además de triunfar, lograron conservar su portería sin recibir anotación.
Los morados, por su parte, suman dos derrotas y han recibido cuatro dianas.
Especialistas consultados por La Nación afirmaron que el buen cierre rojinegro se ha notado en el campo de juego.
“Se ve un cuadro muy bien trabajado. Siento que tiene un juego más elaborado, mientras que Saprissa apuesta a un juego más directo. A la Liga le noto una madurez que fue alcanzando durante el certamen”, afirmó el entrenador Kenneth Barrantes.
El técnico limonense añadió que ve a un Saprissa frágil en defensa, situación que respaldan las estadísticas.
“Hay una vulnerabilidad atrás, sobre todo en zonas específicas como en las espaldas de los laterales”, describió.
Según el timonel Luis Fallas, la mejoría eriza se notó desde que el cuadro quedó eliminado de la Liga de Campeones de la Concacaf, ya que dejó atrás las rotaciones y consolidó a sus mejores hombres para el torneo local.
“Hay algo importante y es una percepción del primer juego. A Alajuela lo vi más entero en la parte física, a Saprissa le podría estar pasando factura no hacer rotaciones para la Concacaf, en cambio Óscar Ramírez ve hoy los frutos de esos cambios hechos”, destacó Fallas.
Por su parte, José Giacone enfatizó que la Liga tiene una confianza más desarrollada, la cual puede ser un arma para sostener momentos complicados del cotejo de vuelta.
“El buen momento que viven les genera seguridad y confianza, pero bueno es un ingrediente más. Cuando uno viene con una seguidilla sin que le marquen, genera muy buen ambiente y credibilidad a nivel interno”, profundizó Giacone.
Los tres entrenadores sí dejaron claro que lo ocurrido en las últimas jornadas no necesariamente fija lo que sucederá hoy en el juego pactado para los 8 p. m., en el Estadio Saprissa.
“Son partidos diferentes. Los números en la fase regular son unos, pero en la fase semifinal es otra cosa. Alajuelense después de todo lo que vivió en la Concacaf se ve más solido y es un equipo muy táctico, pero todos sabemos lo que es el reducto del Saprissa y lo que puede llegar a jugar”, concluyó Giacone.
De esta forma, los erizos llegan con el respaldo de los números, más allá del 2 a 0 a favor que consiguieron en la ida. Es claro que también viven un momento más dulce que el de su archirrival.