Francisco Rodríguez, el nuevo fichaje de Saprissa, empezó a sonar en el fútbol nacional cuando vistió la camiseta de la Universidad de Costa Rica. Si se toman en cuenta las ocasiones en las que celebró anotaciones, fue en ese club donde vivió su etapa más prolifera, sobre todo entre finales del 2018 e inicios del 2019, cuando concretó 15 dardos en 36 compromisos.
Era la tercera vez que se ponía la camiseta celeste y el buen rendimiento lo llevó a firmar con el Herediano, segundo equipo ‘grande’ de su carrera, pues anteriormente estuvo en Alajuelense, donde hizo ligas menores y debutó en la máxima categoría. Pese a ello, con los erizos no pudo anotar goles en los escasos siete juegos que disputó.
Su primera etapa con el Team empezó mucho mejor que con la Liga. Jugó 24 partidos durante el Apertura 2019 y concretó nueve tantos. Eso le permitió irse en condición de préstamo al Deportes Tolima de Colombia, donde jugó nueve partidos e hizo tres goles en medio de la suspensión del fútbol a raíz de la pandemia de covid-19.
Regresó a suelo nacional y con Luis Marín como entrenador siguió gozando de minutos, hasta que empezaron los cambios de timón en el conjunto florense y luego apareció una lesión.
Entre julio y setiembre estuvo de baja. Sin embargo, cuando se recuperó, tampoco fue tomado en cuenta. La llegada de Jeaustin Campos prácticamente acabó con sus opciones. Los números hablan claro: jugó apenas 95 minutos, distribuidos en cuatro partidos (uno de titular) y no festejó ningún gol.
A finales de octubre el jugador incluso aclaró que estaba listo para ser tomando en cuenta, pero ni siquiera aparecía en las convocatorias. Al consultarle a Campos, el estratega dio a entender que Rodríguez no mostraba la intensidad física óptima en los entrenamientos.
Eso no impidió que Iñaki Alonso y la institución morada se fijaran en el delantero, quien debutó con el primer equipo de Alajuelense en 2013 y después pasó por varios clubes: Carmelita, Universidad de Costa Rica, Santos de Guápiles y el Herediano. Además, jugó en el Diriangén F. C. de Nicaragua y en Tolima.
Rodríguez firmó por un año, tan solo cinco días después de que se confirmara su salida de la casa rojiamarilla. Las negociaciones con los morados se dieron rápido y ahora Saprissa espera llenar el vacío que tanto le ha costado en el ataque. Pero no solo piensa en Rodríguez, pues mirada también está puesta en Andy Reyes, quien en el torneo anterior tampoco anotó un solo tanto con Cartaginés.
“Tenía muchas ansias, desde que hablé con don Ángel (Catalina) entre semana, de verlo todo tan cerca, saber que era una posibilidad muy real. Conforme pasaron los días esas ansias se convirtieron en felicidad, sabía que estaba a un paso de llegar al Saprissa, un club tan grande. Ayer en la noche hablamos, que si todo estaba bien, hoy se firmaba. Todos en mi casa estuvieron muy contentos y felices de poder llegar a esta institución”, comentó Rodríguez.
El jugador aseguró que espera ganarse el cariño de la exigente afición morada, que esta lo vea como un saprissista más deseoso de aportar en la gramilla. Con eso, añadió, esperar identificarse con los miles de seguidores y llenarlos de satisfacciones.
“Todos los que trabajamos para esta institución sabemos que debemos dar el 100% en cada detalle. En el momento de estar en el juego, al fin y al cabo el aficionado se identifica porque todos desean estar en la cancha jugando, y cuando uno es el responsable de que el aficionado se vaya triste o feliz para su casa, no queda más que entregarse al máximo y ser profesional”.