La urgencia por un título es cada vez más intensa en Saprissa, que desde la llegada de Horizonte Morado apostó fuerte al crecimiento futbolístico de su cantera en procura del ansiado título 30.
Empero, algunas de las jóvenes promesas no alcanzaron brillo y quedaron relegadas a papeles secundarios –en algunos casos– o simplemente fueron desechadas.
La prisa por un cetro nacional fue reconocida por el presidente morado, Juan Carlos Rojas, ahora que el Torneo de Verano 2013 está a la vuelta de la esquina.
Atrás quedó aquella excusa del proceso con jóvenes promesas. El plantel cuenta con jugadores que, aunque cortos de edad, ya traen en sus espaldas experiencia en Primera División.
Pese a esto, Horizonte Morado sacó la chequera y sin contemplaciones remozó su equipo con refuerzos de peso, sin importarle cuánto costaran.
La llegada del goleador nacional en los dos últimos torneos, Cristhian Lagos, el cotizado volante Diego Estrada, el desconocido lateral izquierdo Moisés Hernández, el zurdo pícaro Diego Madrigal y el experimentado arquero Adrián De Lemos llegan como las esperanzas tibaseñas.
Todos ellos serán guiados por el técnico Rónald González, un viejo conocido de la casa que llega con buen ambiente entre la dirigencia, jugadores y afición, algo que puede ser ventajoso para su trabajo.
Canteranos. Aquellas épocas donde Saprissa debutaba en la Primera a tres o cuatro jugadores formados en sus divisiones menores quedarán este torneo en pausa.
Ahora su plantel está sobrepoblado. La búsqueda de equipos para enviar a préstamos a algunas de sus fichas ha sido la tónica durante los últimos años con la esperanza de acelerar su crecimiento. Así ocurrió con Mauricio Castillo, Kendall Waston, César Elizondo, Ricardo Blanco, por mencionar algunos.
Ahora el timonel González tendrá la difícil tarea de pulir su plantel y reducir a 24 los jugadores con los que apuntará a su primer objetivo, que no es otro que ser campeón nacional.
“Presión siempre hay en cualquier equipo donde se esté. Saprissa siempre está luchando por el título y este grupo no va a ser la excepción. Vamos a dar todo de nosotros”, dijo el portero De Lemos.
“En este camerino hay mucha hambre de triunfo. Eso se nota de lejos y eso nos llena de motivación”, agregó también su compañero Cristhian Lagos.
Así, Horizonte Morado espera aliviar sus dolores de cabeza con ese anhelado título 30 que se ha mostrado escurridizo.