San Carlos lo hizo de nuevo. El cuadro norteño, como en 2019, cuando la Liga hizo una fase regular espectacular y llegó en la últimas fechas a defender un invicto en el Carlos Ugalde, se encargó de acabar con la buena racha manuda. En esta ocasión no sabemos como terminará el torneo, pero el año pasado aquel certamen terminó con festejo del Herediano.
A Alajuelense se le apareció Jeaustin Campos de frente para ubicarlo en el césped y enseñarle que no es invencible. Los norteños acabaron con esa sensación de que la Liga es un equipo sumamente superior, capaz de encarar al mejor del otro grupo y golearlo, como sucedió con Cartaginés.
San Carlos fue más tácticamente, también mostró un orden envidiable y mucha eficacia frente al marco contrario. Por su parte, los manudos pudieron tener más ocasiones para marcar y más posesión de pelota, empero, carecieron de calma frente al marco.
Carlos Mora la reventó en el horizontal, Alonso Martínez falló dos ocasiones, Álvaro Saborío no pudo enderezar un balazo que sacó de zurda desde la media luna y cuando tuvo un frente a frente con el arquero, ganó el guardameta.
San Carlos se vio menos presionado, fue más inteligente. Cuando tuvo que gastar segundos con problemas musculares lo hizo y cuando vio que la Liga encimaría, decidió incluir hombres rápidos para contragolpear.
El gol de los locales fue una viveza completa. Alonso Martínez intentó evitar un saque de esquina, se apoyó en un central, pero su pase quedó corto. Seguidamente, Jeffry Valverde robó y sirvió a José David Sánchez, que centró a un toque para que Rashid Chirino le ganara la posición a Adolfo Machado y marcara.
Los Toros pudieron marcar un par de goles más por medio de esa vía; bien pudo anotar Raheem Cole cuando quedó mano a mano con Mauricio Vargas, pero tardó una eternidad en disparar. Otro que tuvo su chance fue Jeffry Valverde, pero en vez de rematar prefirió centrar y un manudo cortó antes de que llegara un ofensivo.
Andrés Carevic depositó sus esperanzas de remontar en sus cachorros. El cuadro manudo incluyó a Geancarlo Castro y Rashir Parkins para cambiar la dinámica, pero la Liga apostó más por las hormonas que el fútbol; así se vio como Bryan Ruiz, Fernán Faerrón y Álvaro Saborío, entre otros, salieron exahustos. En el caso de Faerrón, hasta lesionado.
Los pelotazos del área eriza hasta la zona sancarleña eran constantes. También Mauricio Vargas fue en dos ocasiones a intentar cabecear, pero en esta ocasión las ganas no alcanzaron.
San Carlos supo aguantar cada embestida gracias a la buena labor aérea de Erick Cabalceta y Keilor Soto; ambos fueron implacables en las alturas y controlaron a Saborío; el ariete tuvo que recurrir a desplazamientos para desmarcarse.
Alajuelense cedió su invicto como visitante contra San Carlos al caer 1 a 0. Ahora, de ocho visitas los erizos ganaron siete encuentros y perdieron uno. A la Liga le resta un partido de fase regular para pensar en la etapa definitiva y de momento en el aire queda el ‘dejavú’ de hace un año cuando San Carlos los derrotó 3 a 1 y luego el título se escapó.
Jeaustin Campos y San Carlos apuestan a la sorpresa e igualan en puntos a Saprissa y Limón, con la salvedad de que los Toros solo tienen un encuentro más por disputar, mientras que a Limón le esperan dos y a Saprissa, tres. A hoy el cuadro norteño sigue con vida y prende velas para que sus dos rivales dejen puntos en el camino y se le haga el milagro.