Un diseño elaborado por el ingeniero Mauricio Arce de la empresa PIASA sirvió para que en la Municipalidad de Alajuela vieran los diferentes usos que le pueden dar al Estadio Alejandro Morera Soto, si deciden hacer la oferta formal para comprarlo, pues el interés persiste.
“El martes de la semana pasada, en el Concejo se tomó un acuerdo en el sentido de que todavía hay interés y que se está en el estudio de la capacidad financiera de la municipalidad para poderlo comprar. Con este proyecto el partido sigue y la bola está en juego”, expresó a La Nación el regidor José Luis Pacheco.
Con 99 años y tres meses de fundación, la Liga ambiciona sentar en este momento las bases de su futuro y uno de los pasos sería construir un estadio de primer mundo, con un aforo para 25.000 personas y que le traiga mayores beneficios al club y a sus seguidores.
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Desde hace varios meses, la dirigencia rojinegra trabaja en este proyecto, a sabiendas de que la decisión final de si se vende el Morera para construir otro estadio recae en lo que digan los socios del club.
La intención de que la Municipalidad sea la que compre el estadio se basa en que de esa forma, los manudos se garantizan que el recinto preservará su estructura y que seguirá siendo uno de los emblemas de la provincia.
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En el diseño presentado por el propio Arce ante el Concejo Municipal, se muestra como aparte de conservar la gramilla, el inmueble también mantiene su gradería original de concreto.
Albergaría el edificio de la Municipalidad de Alajuela y el ayuntamiento podría construir otra obra con opciones de renta para otras instituciones del gobierno que hoy pagan alquileres.
Es decir, podrían convertir ‘La Catedral’ en un centro de gobierno local. Además, se pueden desarrollar áreas comerciales, espacios de esparcimiento y tendrían un estadio que les permitiría hacer actos culturales y deportivos durante todo el año.
La Nación sabe que esa propuesta con el diseño causó impacto e interés en varios miembros de la Municipalidad de Alajuela.
En avance. “Hubo una reunión y el Concejo el martes anterior tomó un acuerdo de abrir un espacio para las negociaciones, básicamente”, comentó el regidor Humberto Soto, quien asegura que la decisión de comprar el Morera pasa por un tema estrictamente financiero.
“Dependemos mucho de la parte financiera municipal, de la capacidad que tenemos de poder adquirir compromisos económicos a ese nivel. Más que ser algo técnico, el asunto es algo financiero, es la capacidad que tiene el municipio de endeudamiento”, insistió.
En febrero, el Concejo aprobó con once votos que el edificio municipal lo construirían en la plaza del Barrio El Carmen. Empero, ya no es seguro que se haga ahí.
Para dicho edificio, el municipio tiene un tope máximo de inversión fijado por el Concejo en $6 millones (unos ¢3.473 millones).
El exalcalde de Alajuela y actual diputado Roberto Thompson, había manifestado en este medio que de acuerdo con el departamento de hacienda, la posibilidad de endeudamiento de la Municipalidad tiene un tope de $10 millones (unos ¢5.788 millones).
Y esa cifra concuerda precisamente con el avalúo del Morera Soto, por lo que la negociación con la Liga sí sería posible si optan por ese financiamiento.
“Sobre el tema del edificio municipal hay varias alternativas y están en estudio, hay que ver la parte técnica y la parte financiera, vamos a ver cuál es más acorde a las necesidades del municipio y a su capacidad de endeudamiento, porque dependemos de eso y eso lo está analizando la parte financiera”, acotó Soto.
También dijo que no hay un plazo definido para que tomen la decisión.
“Nos encontramos en este momento con el presupuesto 2019, el Concejo está enfocado en ese tema, pero yo creo que en unas semanas estaremos definiendo si la Municipalidad puede comprar el estadio”, finalizó el regidor.
El sábado pasado, en la asamblea extraordinaria de Alajuelense, la junta directiva presentó el estudio de factibilidad sobre su proyecto de construir otro estadio.
La Liga ya recibió cuatro propuestas sobre el punto en el que se podría edificar el recinto: Parque Viva en La Guácima, Villa Bonita, El Coyol y el centro de Alajuela. Además, en las próximas semanas llegará una quinta opción, según expresó el presidente del club, Fernando Ocampo.
De momento, los erizos acordaron que a partir de octubre y durante seis meses establecerán mesas de diálogo y análisis y que posiblemente en noviembre de 2019 convocarán a una asamblea extraordinaria para que los socios decidan si se ejecuta el proyecto o no.
“Lo que pasa en la Liga es que aquí somos una democracia, somos los dueños de nuestro equipo y por eso los socios decidimos”, citó Ocampo.
La construcción tardaría unos tres años e implica una inversión de $26 millones.