Luego de cada partido, los entrenadores deben brindar una conferencia de prensa para hacer sus conclusiones del juego; no obstante, esto no ocurrió tras el encuentro entre Carmelita y Alajuelense (1-1).
El colombiano Hernán Torres no pudo evacuar las dudas de los medios de comunicación que le dieron cobertura al partido.
Javier Delgado, gerente deportivo manudo, explicó lo sucedido. Lo achacó a los miembros de la seguridad que estaban en el Estadio Rafael Bolaños.
“Cada quien tiene que saber su rol dentro del fútbol, la persona de seguridad que estaba encargada del portón no sé si sabía qué iba a pasar o qué seguía después de terminado partido. Creo que muchos de ustedes (periodistas) fueron testigos de la situación, que no dejaron pasar al profesor Torres ni a Ferlin Fuentes, nuestro encargado de prensa, y el profesor lo que hizo fue devolverse”, externó Delgado.
El administrativo erizo también acotó que la Unafut está enterada de lo sucedido: “Ya le informamos al delegado de Unafut para que se hagan responsables las personas de la empresa. Este incidente afecta a los medios de prensa”.
En su opinión, lo que procede es analizar los reglamentos para no recibir una sanción por lo sucedido.
Ya en el plano deportivo, Delgado calificó de “increíble” la situación que vive el equipo en el terreno de juego.
"Las oportunidades que no aprovechamos son increíbles, pero vamos a seguir hasta el final. Matemáticamente sí hay oportunidades, pero antes de este partido yo resaltaba que dependíamos de nosotros mismos, cuando usted no depende de lo suyo es lo más incómodo y difícil. Es duro, es amargo, pero es la realidad", añadió.
Además, señaló que esperan enterarse este lunes o martes si ganan o no la apelación por el veto al Morera Soto, luego de que el Tribunal Disciplinario de Unafut le interpusiera una sanción de un partido tras la invasión a la cancha de unos aficionados para insultar al jugador de Saprissa Johan Venegas, tras el clásico nacional del pasado sábado (1-1).