Pérez Zeledón no le quita la mirada las semifinales

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El técnico Daniel Casas cumplió lo que dijo tras perder a mitad de semana frente a la Liga: “Ante Carmelita hay que ganar a como sea”. Ayer salió victorioso, aunque jugando mal.

Los generaleños no podían permitir una tercera derrota al hilo en el Verano, que castiga caro los errores. Tras golear ayer a los verdolagas 0-3, suman 25 puntos, uno menos que los erizos, por lo que de nuevo están en zona de clasificación.

El partido en el Allen Riggionni simplemente fue aburrido. Las ganas por triunfar provocaron un desorden táctico en ambas oncenas e imperó el juego brusco y torpe.

Las emociones salieron de la cabeza del zaguero Roy Myrie, quien marcó un doblete por medio de la táctica fija (al 68’ y 72’), gracias a dos magistrales pases de José Carlos Cancela.

La sentencia cayó al 90’. Un centro del lateral izquierdo Pedro Leal terminó en los pies del recién ingresado Luis Carlos Barrantes, quien hizo un regate con derecha, para luego sacar un remate raso de seguido, con la otra pierna, pegado a la base del palo izquierdo del meta Olger Ruiz.

Los generaleños de momento logran sostener la clasificación en una lucha de cinco equipos por jugar semifinales.

Sin pies ni cabeza. Entre tanto, Carmelita no encuentra el norte.

El técnico interino, Érick Guillén, presentó ayer un equipo con cinco variantes respecto al último juego de Guilherme Farinha. Y se dejó ver desastroso.

Los locales no lograron un solo remate a marco.

Johnny Woodly, con toda y su experiencia, no logró darle presencia a una ofensiva fácilmente dominada por los visitantes.

Sorpresivamente Guillén decidió dejar en la grada al capitán Eduardo Gómez, defensor central que llevaba récord perfecto de minutos jugados y que lideraba el orden de la última línea.

Esa zona, por cierto, ayer se mostró indecisa y con una pésima marca en la táctica fija, vías por donde cayeron dos de los tres tantos sureños.