San Isidro. Todo pintaba para que Pérez Zeledón amaneciera sembrado hoy en zona de clasificación, sin embargo, los sureños desaprovecharon la oportunidad, esa que tendrán que luchar el miércoles ante Cartaginés.
Los generaleños necesitaban aplicar la lógica y vencer en su difícil parcela a un Uruguay tan intermitente, en este torneo, como la luz amarilla de un semáforo.
Sin embargo, el grito de victoria se le atragantó a los del Valle de El General, que supieron de antemano que Cartaginés, el dueño de la cuarta casilla del Invierno, también había cedido puntos en el empate ante Herediano.
Con la igualdad de los brumosos y la posible victoria generaleña (la que nunca llegó), los dirigidos por Luis Fernando Fallas pudieron despertar hoy en esa zona tan codiciada y que da pase directo a las semifinales.
“Era nuestra obligación ganar en casa pero lastimosamente no se nos dio”, dijo Jorge Gatgens.
De esta forma los sureños marchan dos puntos atrás de los de la vieja metrópoli en la tabla, tres días antes de que ambos se vean las caras en lo que podría marcar un importante trillo por ese último cupo a la próxima ronda.
Por eso era vital para los generaleños sacar la victoria ayer, porque no era lo mismo esperar en su casa a un Cartaginés obligado a ganar, a enfrentar a uno que, con el empate, le basta para seguir sembrado donde está.
Además, el césped del Estadio Municipal de Pérez Zeledón quedó bastante afectado luego del juego con los coronadeños, aspecto que le puede afectar bastante al juego que intenten proponer.
“Dejamos ir los puntos en casa, pero a pesar de que la cancha está terrible, tenemos que ganar porque ellos (los brumosos) son un rival directo que tenemos que sacar”, apuntó Francisco Flores.
Por eso ahora los sureños deberán ser mejores contra los brumosos, superar el barro y todo lo demás que acontezca en el juego del miércoles sino quieren volver a desaprovechar otra oportunidad de acercarse a semifinales.