Penal errado por Sarvas cerró mala noche de la Liga

El brasileño pudo darle la victoria a un Alajuelense que se mostró desordenada

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Alajuela.Se jugaban dos minutos de reposición cuando se esperaba que Alajuelense ganara a la Universidad en la ahora llamada Ligahora, pero el brasileño Marcelo Fazzio Sarvas falló el penal que puso la cereza al pastel de una Liga que no mereció más que el empate.

Un empate con sabor a triunfo para los universitarios, pero con amargo sabor para los rojinegros, quienes ayer fueron un mar de desaciertos y fueron presa del futbol ordenado de los visitantes.

El juego de la Liga estuvo lejos del de la U, muy ofensivo, planificado, esperando el momento idóneo para herir a su rival.

Los rojinegros más bien abusaron de un futbol impreciso, sin orden, sin estrategia y sin dirección.

Mientras todos los celestes tenían clara su misión en la cancha, en las tiendas manudas solo Pablo Gabas, Luis Miguel Valle y Allen Guevara sabían cual era su función, pero fueron gendarmes solitarios de un ejército de piernas que no supo derrotar al enemigo.

El gol de Kendall Waston fue la evidencia de la parte más endeble en la Liga: la defensa. Sin restar méritos a la maniobra del espigado atacante de la U, Luis Marín ni siquiera lo incómodo y Johnny Acosta lo vio hacerle un sombrerito y abrir el marcador con un golazo.

Es fácil sospechar que Iván Mraz le diera orden a sus jugadores de atacar a las espaldas de los defensas erizos, ya que en más de cinco ocasiones los universitarios burlaron fácilmente a la zaga local cuando enviaba pases largos.

Con la ventaja merecida la U se fue al descanso con tranquilidad, mientras los aficionados liguistas estaban molestos con el accionar de los campeones nacionales.

Apareció Gabas. La Liga encontró en Marco Ureña el impulso para ir al frente, aunque siguió con un futbol pausado y poco vertical, principalmente cuando Sarvas tomaba el balón. Aunque ayer estuvo laborioso y con más movimiento, el 10 manudo no ha demostrado destellos de buen futbol.

Ante la falta de un motor que revolucionara el juego manudo, Gabas tomó la batuta del equipo.

Un pase largo del argentino a Cristopher Meneses terminó con el gol de Guevara, quien cabeceó casi debajo del marco académico.

Gabas se encargó de borrar momentáneamente la tensión del Morera Soto e hizo estallar de júbilo a su afición cuando marcó el 2-1, luego de Sarvas cobrara en corto un tiro libre cerca del área.

Un despeje deficiente de Marín terminó en pies de Esteban Armijo, quien terminó en el piso luego del empujón del capitán alajuelense.

Minor Díaz cobró con elegancia a un costado de Alfonso Quesada, quien se acostó sobre el otro lado de su marco, luego de intentar desconcentrar al goleador.

La Liga se quedó sin opciones y buscó que Carlos Clark, héroe en el juego contra Pérez Zeledón, llegara mas al ataque y permitiera sacar la victoria ante la U.

Pero cuando el juego agonizaba Gabas se inventó una gambeta y fue derribado en el área por Omar Royero, quien fue expulsado por la dura entrada.

Antes de salir de la cancha bajo los insultos del público, Sarvas erró el penal que dio un frío empate en otro partido deficiente de los campeones nacionales.