Shirley Retana Espinoza, de 33 años, esperaba a una amiga, cuando se vio envuelta en una trifulca entre seguidores de Saprissa y Alajuelense. En medio de la bronca, recibió un balazo en la parte trasera de la cintura.
“Me dispararon a lo loco. Yo simplemente estaba allí”, sostuvo esta ciudadana quien dice que nunca le ha gustado el futbol.
Los hechos ocurrieron la noche del miércoles, mientras se encontraba cerca de las oficinas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de San José.
“Estaba tranquila cuando llegaron unos seguidores de Saprissa y otros de Alajuelense. Se insultaban unos a otros. Eran unos 60 mocosos (muchachos) y también había varias mujeres. Gritaban ‘pleito, pleito’ y unos aseguraban que iba a ganar Saprissa y los otros que la Liga en el partido del próximo domingo”.
Agregó que los reclamos aumentaban de tono, por lo que decidió caminar hacia el OIJ con el objetivo de ponerse a salvo.
“No me dio tiempo, un muchacho disparó sin ningún sentido ni dirección. Cuando sentí la bala, caí al suelo por donde están los teléfonos públicos y de inmediato llegaron oficiales del OIJ, patrullas y la Cruz Roja”.
Nunca perdió el sentido y fue traslada de emergencia al hospital Calderón Guardia.
“Allí me aplicaron lo básico. Me cortaron el pantalón para revisarme y me curaron”.
Ayer al mediodía fue dada de alta, según informó Martín Quirós, médico de la sección de Agudos de ese centro hospitalario.
“Ella tenía una herida con arma de fuego en el abdomen, pero no es un caso complicado y se le dio la salida”, aseveró el galeno.
Tanto Juan Carlos Rojas, presidente de Saprissa, como Raúl Pinto, de la Liga, indicaron que estos hechos son independientes de los equipos que representan.