Cartago. No lo sabía. Por eso su rostro juvenil denotó cierta incredulidad.
Esa fue la reacción inmediata del futbolista cartaginés, Andrés Lezcano, cuando le comunicamos que, con base en el informe arbitral del partido trasanterior, contra Pérez Zeledón, el gol que anotó en esa oportunidad no contará en su cuenta particular.
La razón es que en el informe del árbitro de ese partido, que se jugó el domingo trasanterior, se consignó que se había tratado de un autogol.
“Creo que es injusto. Yo celebré ese gol porque estaba y estoy plenamente consciente de que fuí el último que remató ese balón. Es cierto que tenía a un defensor encima, pero yo fui quien la metió en las redes”, aseguró.
De inmediato, repuesto de la mala noticia, Lezcano, nativo de Cariari de Pococí, recurrió a su filosofía. “Bueno, para compensar, voy a hacer tres goles y más”.
Consultado sobre esta situación, José Manuel Vargas, analista arbitral, explicó que el reglamento da la potestad al árbitro de determinar quién fue el anotador y no hay recurso de apelación posible.
“Aunque en una toma de televisión se corrobore que el jugador A fue el anotador de un gol, pero el árbitro se lo da al jugador B, para efectos estadísticos oficiales, lo que impera y se consigna es el pronunciamiento arbitral”.
“Parece contradictorio”, agregó Vargas, pero así lo establece la reglamentación del campeonato de la Primera División, en consecuencia absoluta con lo que dispone la Federación Internacional de Futbol en ese aspecto.