La Liga puso fin a su larga sequía

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Alajuela. Alajuelense debió esperar cinco años antes de volver a tener la oportunidad de levantar la copa de campeón.

El cetro conseguido ayer puso fin a una sequía de alegrías que pesaba en las tiendas rojinegras desde que se alzaron con la conquista del título en la campaña del 2004-2005 ante Pérez Zeledón.

“Es un sentimiento indescriptible, una alegría como pocas y es un premio para nosotros, para un equipo que ha sufrido y pasado por mucho”, expresó el lateral erizo Carlos Clark.

Y es que la conquista de ayer significó para muchos los primeros frutos de un proceso que a Alajuelense le ha costado el protagonismo que a través de su historia siempre ostentó.

“Costó, fueron años de trabajo y de sufrimiento, de buscar consolidar una idea. Este es un equipo que se unió en las adversidades y que ahora por fin ve la luz”, destacó el volante Cristian Oviedo.

“Muchas cosas me pasan por la mente. Hace cinco años estábamos sufriendo y la verdad ya era hora de que se nos diera y sabe más rico cuando cuesta más”, añadió Oviedo tras el juego.

Para los erizos este es apenas el primer campeonato que logran luego de que en 2007 se implementaran los torneos cortos.

Anteriormente ya habían estado cerca en el Verano e Invierno 2008, cuando llegaron a la final, pero su archirrival el Deportivo Saprissa se encargó de ahogarles la celebración.

Ahora llegaban a la final con casi dos años de no disputar ese último partido de cara al cetro, por lo que los manudos aceptaron que también había algo de obligación.

“Este era nuestro momento. Estoy muy contento, agradecido con Dios por la oportunidad de vivir esto. El equipo había estado cerca de conseguir el título en años pasados pero no se había logrado”, afirmó el defensa y capitán Luis Marín.

Respiro. Fue el agónico gol del argentino Pablo Gabas el que le permitió a los rojinegros extender su sufrimiento hasta los penales, una anotación que el volante y la afición gritaron a todo pulmón.

“Justo cuando se nos iban todas las ilusiones, Dios me encaminó y gracias a él llegó el gol. Hoy (ayer) logramos sacar el triunfo y llevarnos una gran alegría, no solo para nosotros, sino para toda la afición”, aseveró Gabas.

“Ahora se acaban cinco años de espera y de una manera bárbara. Ahorita la verdad es difícil decir mucho”, finalizó Gabas instantes antes de que los aficionados lo abrazaran y metieran en el tumulto que festejó en el Morera Soto.