La mejoría de Alajuelense se da después de la eliminación en la Liga de Campeones de la Concacaf. El equipo rojinegro dio continuidad a un equipo base, no hizo más experimentos y eso se nota en la cancha.
Siento que el momento de la Liga nació por un mal que fue esa eliminación. El partido de ida contra Saprissa demostró, además, que el plantel liguista ha aprendido de anteriores clásicos. Ellos demostraron que pueden controlar a Daniel Colindres y Deyver Vega.
La Liga también llega con un mejor tono físico; al parecer las rotaciones le sirvieron a Óscar Ramírez y tiene mucha validez lo que realizó pensando en la Liga de Campeones de la Concacaf.