Alajuela Jonathan McDonald no logró contabilizar todas las faltas que recibió ayer y que Jeffrey Solís no sancionó.
El atacante rojinegro intentó mantener siempre la ecuanimidad y trató de olvidar que el réferi que anoche no pitaba nada a su favor fue el mismo central que lo expulsó en la final del Verano 2014 contra Saprissa.
“Ahora tengo más autocontrol gracias a Dios”, manifestó Jonathan McDonald.
El ariete no perdió la cabeza, siguió atacando a pesar de los golpes que recibía y su recompensa llegó al 66’, con un gol que fue todo un desahogo para él.
Antes de la jugada del gol, Solís le anuló un tanto, en una decisión dudosa por parte del juez.
En cuanto a las faltas recibidas, McDonald dijo: “Muchas veces pasa al propio, eso queda al criterio de cada defensor, yo solo quiero jugar, anotar y contribuir para alzar la copa, que ya tenemos un año sin hacerlo”.