Guápiles. El punto a domicilio no es malo, pero no es lo que Alajuelense quería para su debut.
La Liga fue a Guápiles y dividió honores con el Santos, en un partido de pocas emociones, sin goles, pero con llegadas en ambos marcos. De cierto modo, eso refleja evolución en los erizos.
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Y Jonathan McDonald finalmente jugó como atacante, a pesar de que se le había visto como volante ofensivo en los últimos fogueos de Alajuelense.
Mac cree que se equivocó y que una mala decisión suya evitó que la Liga sumara sus primeros tres puntos en el certamen.
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Cuando Henry Bejarano pitó el inicio del encuentro, los rojinegros de inmediato se fueron al frente; Allen Guevara centró y McDonald estaba listo para definir. Sin embargo, él lo intentó de cabeza y en este momento, todavía se arrepiente.
“No me esperaba que viniera tan adelantada, yo hice lo más que pude, venía un poco incómoda, pero sé que pude haber hecho más, pude recepcionar con el pecho y rematar, pero son de esas jugadas que son demasiado rápidas y lo único que pensás es en ejecutar con lo que tengás en el momento, y opté por el cabezazo”, relató McDonald.
Dijo que al llegar a su casa, lo primero que hará es observar todo el partido, ya que eso ocurrió a los ocho segundos, pero hubo una acción parecida en el alargue.
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“Esa es la única forma de aprender de un simple error, me voy con esa jugada presente, que la tenía que haber concretado y si lo hubiera hecho, tal vez el resultado habría sido diferente”, aseguró el rojinegro.
Sin embargo, él no es el único responsable de que la Liga no lograra anotarle a un compacto Santos de Guápiles, que inició dormido, pero que conforme avanzaron los minutos, pobló más el medio campo y comenzó a complicar a los erizos.
Por la Liga, Allen Guevara se soltó a jugar y fue uno de los puntos altos, además, la defensa de José Giacone se mostró segura.
En el bando local, quien manejaba los hilos conductores del Santos fue Ismael Gómez, quien incluso terminó con la cabeza vendada debido a que se estrelló contra una de las vallas que están pegadas a la pared de cemento.
A diferencia de lo que pasaba en la pretemporada, los subcampeones nacionales sí se animaron a la hora de ir al frente, crearon varias jugadas de peligro y José Guillermo Ortiz quedó cerca de anotar en algunas ocasiones.
Por Santos, la acción más clara a gol estuvo en piernas de Kenny Cunningham, tras un centro de Gómez, quien aprovechó un mal rechazo de Harold Cummings y ahí, Patrick Pemberton se vistió de salvador para los manudos, pues desvió el disparo.
A pesar de las variantes ofensivas en los dos equipos y que los santistas contaban con tres exrojinegros con sed de revancha, el gol nunca llegó. El miércoles, la Liga recibe a Limón y Santos visita a San Carlos.