1 ¿Qué saben de la cesión de la franquicia del equipo a la Liga?
–Hemos escuchado rumores pero nada en concreto, aunque después del ascenso sí se nos dijo que era una posibilidad.
2 ¿Nadie les ha dicho nada en el equipo?
–A nosotros nos las dieron después de quedar campeones, en una reunión que hubo después en Nosara. Ahí nos dijeron que iban a hacer todo lo posible para que el equipo continuara, pero al no haber una cabeza que se hiciera cargo era muy difícil.
3 ¿El equipo sigue entrenando o no?
–Nosotros desde que terminó el campeonato y se fue Michael (Van Mysin, principal accionista del club) no se continuó más con lo que es el grupo, todos quedaron a la deriva, algunos están jugando en sus pueblos, otros se ubicaron en Segunda y otros se dedicaron a sus cosas.
4 ¿Era imposible sostener el equipo sin su principal benefactor?
–Es que él era la cabeza, era el que hacía y ponía todo, y al irse dejó a este muchacho Sasha (Nitschke, alemán que quedó encargado de la franquicia) de la negociación con Alajuelense, porque al parecer ya había algo adelantado con ellos. Michael hizo lo que pudo por buscar patrocinadores antes de irse, pero no se pudo y así el equipo quedó sin nadie para hacerle frente a todo.
5 ¿Cómo tomó el grupo el no poder gozar ese ascenso que tanto les costó conseguir?
–Duele porque todos luchamos por esa ilusión de estar en segunda, y todo ese esfuerzo se perdió ahí. Yo tenía la ilusión de dirigir en Segunda y los muchachos de jugar ahí, entonces fue muy desmotivante. También hay que comprender la otra parte, que la cabeza no iba a poder estar, entonces nadie se iba a ser cargo.
6 ¿Y usted qué está haciendo ahora?
–Esperando poder enrolarme en otro equipo, no me ha salido nada pero espero alguna oportunidad que me salga por ahí, yo vivo del futbol, así es esto.