Horacio Esquivel se alegró cuando Alajuelense echó mano de Celso Borges

Horacio Esquivel contó sin problema alguno lo que tenía analizado de Liga Deportiva Alajuelense y cuánto le ayudó eso para el triunfo de Guanacasteca

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Desde el banquillo de Guanacasteca, Horacio Esquivel siempre lanza alguno que otro dardo contra Liga Deportiva Alajuelense y esta vez no fue la excepción. Después del triunfo de la ADG por 3-0 frente a la Liga, el técnico explicó por qué se alegró cuando Martín Arriola ordenó el ingreso de Celso Borges.

Antes de eso, Horacio Esquivel pronunció que una de las virtudes es que tiene un excelente preparador físico como Ruber Fonseca. El técnico de la ADG mencionó que él sabe que sus jugadores sufren durante la semana para disfrutar del fin de semana.

“Eso les digo a ellos, que durante la semana haya dolor por trabajar fuerte, por la intensidad que le da al equipo, porque hemos hecho una buena mancuerna. Lo que pido, lo hace y los jugadores muy atinadamente lo están cumpliendo”.

Añadió que a partir de eso, Guanacasteca no para de ser un equipo intenso, de tener dinámica y que colecciona varios juegos sin encajar anotaciones.

De la crisis actual de Alajuelense no dijo nada, porque aclaró algo: “Me preguntaba sobre el rival y lo miro solo para buscar la manera de cómo golpear deportivamente hablando”.

A partir de eso, expresó que lo que él analiza es la Liga es un equipo muy lento por dentro, muy pausado por dentro.

“Le pedí a mis jugadores que tratáramos de apretar un poquito más rápido en la parte interna de ellos, en el caso de (Michael) Barrantes. Después, cuando me metieron a Celso (Borges), pues le soy sincero. Con todo el respeto, me alegré.

”Esperaba al que habían traído de Liberia, a Kevin Cabezas en el cambio. Metieron a Celso y seguimos entonces trabajando por dentro y le metemos velocidad por los costados. Eso lo que yo analicé del juego”, explicó Horacio Esquivel.

Dijo que después del primer gol, no quiso esperar a que Alajuelense se acomodara en el juego y por eso hizo un cambio tempranero. Con algunas modificaciones, encontró la forma de controlar el juego.

“Los partidos se ganan también en los primeros tiempos, no al final. La ventaja que tenía, la debíamos aprovechar y en el segundo tiempo fui buscando más velocidad”, relató.