Hernán Rivero, el nuevo atacante manudo, es un delantero que tiene gol y capacidad para el pivoteo, pero no es el hombre que levanta las graderías por sacar a un zaguero con un regate.
Maxi Duarte y Bruno Propato, periodistas del diario deportivo Olé, de Argentina, describen así al fichaje con que Alajuelense cerró el mercado de piernas para el Verano 2016.
Ambos comunicadores lo retratan como un hombre de área y que sabe imponer su físico, con 1.92 m de estatura.
“A Rivero no le pidan una gambeta, su estilo no es ese. Él es de área, de los tipos que tiene el marco entre ceja y ceja, juega bien de espaldas al arco, capaz de extender para que sus compañeros aprovechen. Es un buen jugador”, describió Prato.
Duarte explica que el atacante registra apenas seis anotaciones porque no tuvo un año regular en la titularidad de All Boys, no por sus condiciones sino por preferencias del técnico.
“La cantidad de goles anotados puede contradecirme, pero la razón es que no tuvo regularidad con el técnico que inició la temporada. Luego, con Pepe Romero fue otra historia, incluso él lucho para retenerlo. Es una de las promesas que tiene el club”, dijo Duarte.
Las características de Rivero calzan con lo que el técnico Javier Delgado solicitó para una zona de metralla donde abunda la velocidad y el desequilibrio. Es un departamento que gana mucho en fortaleza.
“Es algo diferente a lo que tenemos en el plantel; nuestros delanteros son de otras características. Rivero es alto, de buen juego aéreo, buen pivoteo y viene a complementar lo que tenemos. La idea era no traer lo mismo que tenemos. El martes llega al país y tiene un punto a favor, porque es un jugador activo”, dijo Delgado.
El Sheriff encontró en Argentina el complemento para sacar a Jonathan McDonald del centro del ataque y así explotar su brío en los balones al espacio que pueda extender Rivero .
Delgado explica la contratación. Uno vez conocido el nombre de Hernán Rivero saltó la duda de quién era el jugador y de dónde provenía.
Los principales buscadores en Internet y de sitios especializados en fútbol registraban una escueta información: un atacante joven con solo un año de fútbol profesional y un pasado en las inferiores de Boca Júniors que sirve de poco si no se debuta en ese club o en otro de nombre.
All Boys es un club de historia en Argentina, pero ha venido a menos por una fuerte crísis económica. Descendió a la Segunda División en el 2014 y en el último campeonato salvó la categoría en los últimos juegos.
Javier Delgado ironizó ayer en conferencia de prensa, señaló que el cartel que pueda tener un jugador es lo de menos.
“Se puede comparar la Segunda División de Argentina con nuestro fútbol, Honduras, Guatemala o México y las comparación será subjetiva, depende quien las haga. Creemos que el muchacho tiene las condiciones”, sentenció Delgado.