Gracias a Daniel Colindres, Saprissa vio la luz al final del túnel para ganarle 1-0 a la UCR

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Un solitario gol de Daniel Colindres provocó que Saprissa viera la luz al final del túnel.

Luego de estar a oscuras tres cuartos de partido, el campeón nacional doblegó a un ríspido equipo de la Universidad de Costa Rica que estuvo a poco de salir con un punto.

La U ejerció alta presión sobre los jugadores saprissistas y ello provocó que el equipo casa no se viera lúcido en el campo.

Cada vez que un morado tenía la pelota, al menos dos académicos lo asfixiaban y acababan desarmándolo.

La propuesta universitaria incomodó al máximo al cuadro morado que, en la primera parte, merodeó pocas veces el área rival.

Su mayor acercamiento fue un remate de Daniel Colindres que el guardameta Carlos Méndez rechazó de puños antes de cumplir la media hora de partido.

Tal y como sucedió en el juego inicial en San Carlos, no hubo una adecuada conexión entre la mediacancha y la delantera del campeón.

A pesar del regreso de Mariano Torres a la cintura saprissista y la apuesta por Keven Alemán, de leves chispazos, la generación de fútbol se centró en corto circuitos sin mayor suceso.

Una vez se fueron al descanso, quedó la interrogante de si la escuadra estudiantil tendría el combustible para mantener a raya a un monarca, a todas luces, obligado a cambiar de semblante y sobre todo a anotar.

Conforme el reloj se fue comiendo los minutos, no hubo mayores señales de mejoría en el conjunto tibaseño, de local ayer en el Estadio Nacional.

La U no perdió la compostura y se aferró al plan de amordazar a su oponente, cuidarse la espalda y provocar alguno que otro sobresalto en ofensiva.

El ingreso de Jordan Smith encendió la molestia de una afición local que la cargó contra él cada vez que tocó la pelota. La silbatina castigó sus centros desviados.

Lo contrario a lo vivido por Smith le tocó a Colindres. Cuando más atascado estaba el partido, apareció el mediapunta morado para abrir un boquete en la muralla universitaria.

A doce minutos del final, Colindres se quitó la marca de dos celadores (Bryan Vega e Ignacio Quesada), cruzó un centro-remate que se incrustó en la escuadra de Carlos Méndez.

El gol quitó el grillete que colgaba de las piernas saprissitas la mayor parte del juego y les dio tres puntos a los dirigidos pro Carlos Watson.

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