Jicaral, Lepanto. El defensor del Uruguay de Coronado, Elkin Scooby, sacó unas tijeras en el altercado que se dio al final del juego entre Jicaral Sercoba y Uruguay de Coronado.
Tras la victoria del conjunto jicaraleño 1-0, lo que le dio el título del Torneo de Apertura, los integrantes del Uruguay ingresaron a la cancha a increpar al árbitro central Jimmy Torres, a quien le reclamaron el poco tiempo de reposición y algunas acciones puntuales como la no expulsión del volante local Greivin Ureña.
Empujones, gritos y ofensas se escucharon contra el trío arbitral e incluso aficionados e integrantes de Jicaral Sercoba también participaron en el incidente. Algunos trataron de apartar a sus compañeros y otros defendieron a la seguridad del plantel.
En el tumulto, el jugador Scooby fue uno de lo que más reclamó e incluso la fotógrafa de La Nación, Gesline Anrango, logró tomar una gráfica en la que se observa al jugador con unas tijeras en la mano y cómo es detenido por sus compañeros Michael Rodríguez, asistente técnico del entrenador Manuel Gerardo Ureña, y el jugador Enoc Pérez.
En un principio Scooby, quien salió de cambio en el minuto 62, se retiró a los camerinos, pero posteriormente regresó y fue cuando traía la tijera en sus manos.
El accionar de Scooby también fue confirmado por Alex Rojas, oficial de turno de la empresa de Seguridad Falcom de Nicoya, quienes estaban a cargo de los miembros de seguridad que estuvieron en el estadio de la Asociación Cívica Jicaraleña, donde se efectúo el compromiso.
"Nuestros oficiales Wálter García y Gustavo Castillo, al entregar las armas y el informe de su labor, nos manifestaron que había un jugador en la cancha con unas tijeras, lo cual los alarmó, porque durante el incidente se dieron forcejeos entre los futbolistas y varias personas", comentó Rojas.
Castillo comentó que observó a Scooby con la tijera e incluso dijo que intentó agredir a un aficionado.
"El jugador que estaba con la tijera se le fue encima a un señor, un aficionado que estaba en la cancha. Ese jugador estaba muy bravo, agresivo, por lo que le pedimos que se tranquilizara, que guardara la tijera", comentó.
El oficial agregó que intentó persuadir al futbolista para que le entregara el artículo pero el defensor no quiso.
"Nosotros solo pensamos en proteger a las personas y por eso insistíamos en que la guardara (la tijera) y estábamos atentos a lo que iba a hacer, pero al rato unos compañeros de él le hablaron y se lo llevaron para el camerino", describió Castillo.
Se intentó conocer la posición de Scooby y del plantel uruguayo, pero los jugadores se retiraron inmediatamente del estadio sin dar declaraciones e incluso ni siquiera subieron a la tarima de premiación por su trofeo y medallas como subcampeones.