¿Llega al clásico con el Saprissa que quiere?
Es el que nos ha alcanzado para estar de primeros; pero es difícil que un técnico esté satisfecho con el rendimiento, a no ser que sea campeón. Hemos hecho cosas buenas, pero hay que mejorar otras. Llegamos en un buen momento, sí –lo ratifican las jornadas– pero ahora todos van a querer sacarnos de esa posición.
¿Cómo está el equipo con el tema de bajas?
Creo que todos van a estar recuperados para el partido, ahora el asunto es determinar cuáles son los que están mejor para el juego. Lo de Michael (Umaña) fue un golpe y aunque todavía no tengo un reporte no creo que sea un impedimento para que esté; (Diego) Madrigal ha venido en una semana futbolística y viene en evolución; con Mynor (Escoe) era una tendinitis y ya se descansó tres días así que vamos a ver si está disponible y David (Ramírez) ya cumplió su sanción; el abanico de posibilidades está amplio.
¿Qué espera del juego?
Los clásicos son siempre partidos muy intensos y que se revisten de otra importancia por lo que significan y porque le debemos eso a los jugadores que hicieron esta rivalidad. Así que espero un partido de luchas parejas, ojalá que sea un lindo partido y que podamos ver el Nacional lleno.
¿Pesa que lleguen figuras en tan buen momento?
Claro, los dos tenemos todos los argumentos para hacer un buen partido, inclusive el ambiente futbolístico con la clasificación al Mundial, con los seleccionados, o con los rendimientos individuales y grupales en los dos equipos.
¿Llevan ventaja por jugar en el Nacional o es terreno neutral?
Es una cancha neutral, la cancha nuestra está en Tibás. La única “ventaja” que podríamos tener es que hemos jugado más que el rival ahí en esta temporada, pero es un estadio que a todas luces cae bien para los dos equipos.
¿Con tres clásicos encima es este más fácil para usted?
Yo digo que todos son difíciles, así como para nosotros fue difícil el partido allá (en Alajuela) para ellos fue difícil aquí también (Tibás), son partidos de carta abierta por la calidad de los jugadores, porque los dos equipos los tienen y tienen buenas estrategias.
¿Hay un favorito?
Para mí no, estamos parejos.