Aquel intercambio de franquicias entre Liberia Mía y Barrio México que propusieron Mario Sotela y Minor Vargas en julio del 2010 se ha convertido en la piedra en el zapato del futbol nacional en los últimos años.
Y es que al no contar con el aval de la Federación Costarricense de Futbol (Fedefútbol), ambos optaron por cambiarle solo el nombre y los colores al equipo, es decir, solamente le cambiaron la ropa al maniquí.
Así el nombre de Barrio México como tal volvió a Primera División por un breve período, pero la franquicia siempre fue la del equipo liberiano, por lo que las deudas que el club pampero arrastraba siempre corrieron a nombre de Liberia Mía Sociedad Anónima y no de los canelas.
Sin embargo, era tanto la fiebre por estar en la máxima categoría que el empresario y cabeza de Barrio México, Minor Vargas, asumió algunas de las deudas que tenía en aquel momento el cuadro liberiano.
Ese pareciera ser el portillo por el cual el empresario Luis Cubillo busca hoy recuperar el derecho a jugar en Primera, ya que según el empresario, aquellas deudas caen ahora en Barrio México y Minor Vargas.