El nuevo Cosmos retoma el camino hacia las estrellas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Entre 1971 y 1985 Nueva York fue la ciudad luz del balompié en Estados Unidos. Por un instante en el tiempo el brillo del Rey Pelé, el Káiser Franz Beckenbauer y el goleador azzurro Giorgio Chinaglia llegó a rivalizar con el de los grandes ídolos deportivos en una nación a la que todavía le costaba comprender como la pelota podía correr a ras del césped.

A golpe de chequera, el Cosmos hizo creer por década y media que el fútbol podría llegar a convertirse en uno de los deportes predilectos de los estadounidenses. Pelé y compañía marcaron el hito de congregar a más de 77.000 espectadores para un solo encuentro, en 1977.

La algarabía provocada por el brasileño y sus compañeros fue tal que en el año de 1978 el Cosmos mantuvo una asistencia promedio, en el Giant Stadium, de 47.856 espectadores.

La constelación. En 1975 le pagaron a Pelé $2,8 millones para que, a sus 34 años, dejara su retiro del Santos. Luego se le fueron uniendo otros astros como el campeón mundial alemán Beckenbauer y Carlos Alberto, compañero del Rey en ese gran equipo que Brasil tuvo en 1970.

El italiano Chinaglia dejó la Lazio para llegar a Nueva York cuando aún se encontraba en el prime de su carrera y fue goleador del conjunto neoyorquino en siete campañas.

Fueron años mágicos para el balompié en Estados Unidos, mas el sueño murió cuando Pelé se retiró de la disciplina. Después de su partida la asistencia de toda la liga cayó abrumadoramente y la televisión le dio la espalda al deporte.

Y ya en 1984 la North American Soccer League (NASL) cerró sus puertas y un año después lo hizo su club insignia, el Cosmos.

Renacer de un sueño. En 2010 el Cosmos renació. No tardó mucho en relanzar su marca en la Gran Manzana y lo hizo, nuevamente, con grandes nombres del pasado; siendo Pelé su presidente honorario y el exastro francés Eric Cantona su primer gerente de operaciones de fútbol.

En un inicio el plan era conseguir fondos para optar por una de las nuevas franquicias que la MLS se disponía a abrir. Sin embargo, no alcanzó para pagar los $100 millones que sí pagó el Manchester City –en asociación con los Yanquis– para abrir el New York City FC, equipo que empezará a competir en el 2015.

Así que el Cosmos volvió a la también renacida NASL , donde ya obtuvo un campeonato (2013) bajo las órdenes del entrenador venezolano Giovanni Savarese.

Su jugador más famoso hasta el momento había sido el hispano-brasileño Marcos Senna, ganador de la Euro de 2008.

Justamente él fue la llave para la firma del exgoleador del Real Madrid Raúl González, quien llegará a Nueva York como el eslabón para encender aquel mediático camino de luminarias.

A modo de curiosidad, en el 2015 los dos máximos goleadores de la selección de España jugarán en la Ciudad que Nunca Duerme: David Villa debutará con el con el City FC y Raúl con el Cosmos.