Antes de iniciar la reunión de la Comisión de Arbitraje el pasado lunes, dos árbitros habían tomado sus medidas en caso de una posible designación.
Un "certificado médico" y el argumento de "motivos personales", originaron el nombramiento de Víctor Rodríguez, silbatero cuya escogencia levanta polémica en la calles.
Rodríguez salió elegido para dirigir el clásico del domingo entrante porque a la Comisión de Arbitraje le amarraron las manos. Allí no confían en la credibilidad del documento clínico de Rodrigo Badilla o los "motivos" que aduce Ramón Luis Méndez.
Melvin Lobo Cavallini, presidente de la Comisión, explicó que la situación lo tiene molesto porque ellos (Badilla y Méndez) no fueron cordiales.
Badilla afirmó que sufrió una lesión en el tobillo de su pie izquierdo y según dijo: "Envié un dictamen médico que deben respetar." Méndez argumentó: "En mí, privan primero asuntos personales que atender, antes que un clásico."
Julio César Soto, directivo manudo, consideró: "Rodríguez no está para manejar un clásico de tanta trascendencia como el del domingo, y nuestro cuestionamiento es que le falta mucho para manejar el clásico. En Alajuela no dudamos de su honorabilidad, sino de la falta de roce por sus antecedentes al tomar decisiones; nos preocupa y vamos a estar atentos."
La noche del lunes asustaba para algunos árbitros, entre ellos a Badilla y a Méndez. Como medida "autodefensiva", antes de la escogencia, enviaron por escrito a la Comisión sus razones para esquivar un eventual nombramiento.
El presidente de la Comisión no cree en ello, pero lo respeta. "Vale que tenemos otros árbitros y confiamos en Víctor Rodríguez; ninguno de los dos equipos ha objetado su nombramiento", explicó.
Agregó: "Aunque existiera alguna objeción siempre lo hubiéramos enviado."
La designación de Rodríguez, a quien no se pudo localizar por encontrarse en Limón, en misión de oficial de tránsito, no baja la "roncha" en la Comisión, por el contrario, la alergia crece.
Para uno de los dirigentes que pidió el anonimato, en el caso de Badilla es la segunda vez que se presenta una "excusa" de cara a un clásico. Explicó: "Para el clásico anterior envió una nota diciendo que iba para un matrimonio en Nicaragua y que su familia quería que todos estuvieran juntos. Le pedimos después que nos presentara el pasaporte y nunca lo trajo."
Sobre sus antecedentes antes de un juego Saprissa-Alajuela, Badilla comentó: "No le tengo miedo a ningún clásico y considero que para este ya había estado dos veces en un partido de Alajuela (San Carlos-Alajuela y de línea Alajuela-Saprissa)."
"Adelanto que no podré dirigir este ni los otros clásicos, que puedan venir en caso de una eventual final y le deseo suerte a Rodríguez para el domingo", sentenció el árbitro mundialista EE.UU. 94.
Su colega Méndez aseguró: "Si la Comisión me quiere para los otros dos clásicos participaría en ellos."
El futuro de Badilla y Méndez en la Comisión quedó "en suspenso" para escogerlos a una virtual final del campeonato.
Incluso, se argumenta que el nombramiento de uno de ellos, en algunos de los dos clásicos venideros, si se llega a una final podría causar renuncias en la comisión de arbitraje.