Cartaginés pudo salvar un empate en la agonía

Un penal cobrado por Pablo Brenes le dio la igualada a dos tantos ante sureños

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Cartago. En un juego que dominó por largos trechos, pero que estuvo a punto de perder, el Club Sport Cartaginés rescató un empate (2-2) de última hora ante el Municipal Pérez Zeledón.

Los brumosos no tradujeron en la red su mejor juego.

Como dice el viejo dicho del futbol: “El que no hace los goles, ve cómo se los hacen”.

El gol de Erick Marín para los generaleños fue la confirmación de esa vieja sentencia, porque se trataba de la primera llegada de los visitantes.

Sin embargo, ese tanto sirvió de acicate para los brumosos y, en especial, para el delantero Diego Joaquín País.

El “9” ya había dispuesto de buenas oportunidades para abrir el marcador, las cuales falló.

País le “robó la espalda” al defensor Néstor Monge, quien nunca se enteró de la presencia del atacante azul.

El asunto es que la igualada dio una sensación de justicia dado lo que se veía sobre el campo del estadio Fello Meza.

A la buena labor de País se le debe sumar la sapiencia de Pablo Brenes en la generación de juego de los cartagineses.

Si no se fueron arriba fue porque el meta de PZ, Adrián de Lemos, evitó el desempate en un mano a mano con País.

Cartaginés se vio mucho mejor que los Guerreros del Sur en esta primera parte, sobre todo en el pie a pie y la circulación de la pelota.

Eso cambió en la segunda mitad, más que nada con el ingreso de Albán Gómez.

Cambio. Así Pérez tuvo mejor criterio con el balón y una jugada generada por el relevo le permitió a los del Sur irse arriba en la pizarra.

Fue un gol para ponerse de pie y aplaudir: la chilena espectacular de Ariel Rodríguez fue una hermosa estampa futbolera que valió el boleto del partido.

Cartaginés perdió equilibrio con la salida de Óscar Granados. Su relevo, Leonardo Madrigal, no estuvo a la altura.

El juego se le complicó a los de casa, porque no encontraban por dónde enrumbar el cotejo.

Con la afición brumosa con el ceño fruncido –su usual dosis de sufrimiento– llegó el empate.

El árbitro Luis Fernández, con la presión del capitán José Villalobos Chan, concedió una pena máxima a los brumosos por una mano de Rodrigo Salomón.

Cobró Pablo Brenes, sin muchos miramientos, para empatar el juego y evitarle un disgusto mayor a los seguidores cartagineses.

Así es el futbol: Cartaginés salvó un punto in extremis cuando estaba para ganar los tres.