Río de Janeiro (DPA). Durante décadas aceptó gustoso los homenajes y los flashes, pero el ex futbolista Pelé quiere ahora descanso y bajo perfil en la celebración mañana de sus 70 años.
"Pelé festejará sus 70 años de la misma manera que lo hizo los 69 años anteriores: solamente con su familia", dijo a dpa Pepito Fornos, portavoz del que muchos consideran el mejor futbolista de todos los tiempos.
A la lluvia de propuestas para que participara en homenajes o concediera entrevistas, Pelé respondió con una carta-modelo: "Mis queridos hermanos: agradezco la invitación, pero el mejor regalo a mis 70 años es tener salud, reconocimiento y el amor de todos aquellos que me apoyaron e incentivaron por todos estos años en todas partes del mundo".
El tono humilde y el bajo perfil son un rostro novedoso del ex jugador, quien suele referirse a si mismo en tercera persona, acepta gustoso el título de mejor futbolista de la historia y rechaza cualquier comparación con el argentino Diego Maradona.
"Cuando me voy a Argentina les digo: discutan primero quién es el mejor de Argentina y luego veremos quién es el mejor del mundo", afirmó, en una entrevista reciente, en la que recordó que, durante muchos años, Alfredo Di Stéfano también estuvo considerado como el mejor de la historia por los hinchas del país vecino.
El momento más agrio de la disputa entre los dos genios de la pelota ocurrió en 2000, cuando la FIFA decidió realizar una elección por Internet para designar al "fútbolista del siglo XX". Maradona ganó ampliamente la disputa, pero la FIFA, en el último momento realizó otra consulta entre "expertos" y entregó otro premio de igual valor a Pelé.
"O Rei" tiene a su favor las estadísticas. A lo largo de sus 21 años de carrera, cerrados en 1977 en el New York Cosmos, anotó nada menos que 1.247 goles -casi cuatro veces más que Maradona-, y conquistó 31 títulos, entre ellos los de los Mundiales de Fútbol de Suecia 1958, Chile 1962 y México 1970 y, con el Santos, el bicampeonato de las Copas Libertadores e Intercontinental en 1962 y 1963.
Nacido el 23 de octubre de 1940 en la ciudad de Tres Cora‡oes, en el estado de Minas Gerais, el niño Edson Arantes do Nascimento se mudó con su familia a la ciudad de Baurú, en el interior de Sao Paulo, y a los 16 años jugó sus primeros partidos en el Baurú Atlético Club, donde recibió el apodo de Pelé.
"Al inicio no me gustó. Mi nombre era Edson. Llegué a pelearme por eso con un chico de la escuela... Me castigaron con dos días de suspensión y después de eso todos los demás chicos pasaron a llamarme 'Pelé'", recordó.
Meses después de ingresar en el Baurú, llamó la atención del poderoso Santos, donde inició en 1956 su marcha rumbo a convertirse, menos de dos años después, en el jugador más joven de la selección brasileña que buscaba su primer título mundial en Suecia 1958.
Allí inició la disputa en el banquillo de suplentes, pero luego conquistó un puesto en el equipo titular y anotó seis goles que ayudaron a allanar el camino de Brasil hacia el título. Al regresar a Brasil, fue la gran estrella de la "era dorada" del Santos, que en los 15 años siguientes conquistó diez títulos de Sao Paulo y se coronó pentacampeón de la Copa Brasil y bicampeón de las Copas Libertadores e Intercontinental.
El punto culminante de su carrera fue sin dudas el emblemático gol número 1.000, que anotó en el Maracaná en la noche del 19 de noviembre de 1969, superando con un tiro penal al arquero argentino Edgardo "Gato" Andrada, del Vasco da Gama. "O Rei" dedicó el tanto histórico "a los niños".
Las glorias conquistadas sobre la cancha, sin embargo, no evitaron que, en 1976, Pelé enfrentara problemas financieros y por ello aceptara una propuesta para divulgar el fútbol en el mercado estadounidense jugando por el New York Cosmos.
Allí nació el "Pelé empresario", que descubrió el gigantesco potencial comercial de su propia imagen y pasó a firmar contratos con grandes grupos transnacionales.
Esos contratos hoy aseguran tranquilidad financiera no sólo al "Rey" sino también a su numerosa familia, que incluye a cinco hijos nacidos en sus dos casamientos -con Rosemary Cholby y con Assiria Lemos- y otras dos hijas nacidas de relaciones eventuales del ex futbolista, una de las cuales, Sandra Regina, falleció a raíz de un cáncer en 2006.
La vida y la obra de Pelé han sido esta semana objeto de numerosos reportajes en la prensa y en la televisión brasileña. Casi todos destacan el duelo con Maradona por el título de mejor futbolista de la historia.
Pero en Brasil, al menos, no hay dudas sobre el ganador: desde el más humilde hombre de la calle hasta el veterano ex entrenador Mario Lobo Zagallo, todos coinciden en que, hasta hoy, no ha surgido un candidato a quitarle la corona a "O Rei".