Los tres penales atajados por la pampera Dinnia Díaz, en la semifinal eliminatoria de la Concacaf en Chester (EE. UU.), son históricos para las selecciones ticas.
Sus rechazos ante Trinidad y Tobago clasificaron al país a su primer Mundial mayor e implantaron un nuevo registro patrio.
“Es un momento histórico para el resto de nuestras vidas. Esperamos que las próximas generaciones lo logren y nos sigamos clasificando a los mundiales”, valoró en ADN Radio Dinnia, de 26 años y nativa de Sámara, Guanacaste.
Antes, José Francisco Porras paró dos cobros con la Mayor, en la final de Uncaf 2005 ante Honduras y luego en la de 2007 con Panamá.
En torneos de la FIFA existen otros dos casos de porteros que atajaron tres penales, detalló David Noemi, vocero de la FIFA.
Peter Gulacsi, de Hungría, lo hizo ante la República Checa, en el Mundial Sub-20 de Egipto 2009; y la norcoreana Ok Kim Chol con Estados Unidos, en la reciente Copa Sub-20 Femenina en Canadá.
Carlos F. Ramírez, afamado historiador azteca, reportó que el récord mundial es del argentino Sebastián Quiligotti, del Sportivo Isla Verde, al detener seis penales seguidos al Boca Juniors de Camilo Aldao, en diciembre del 2010.
“La hazaña de la tica es más encomiable al lograrse en un nivel más competitivo e importante que la Liga de Tercera División en Argentina”, opinó Ramírez.
Otros. El récord europeo lo posee el rumano Helmuth Ducadam, quien rechazó cuatro penales consecutivos en el partido entre Steaua Bucarest-Barcelona (2-0), por la final de la Copa Europea, en mayo de 1986, según el estadígrafo argentino Roberto Mamrud.
Otro registro pero en Suramérica, durante la Copa Libertadores de 1998, lo posee el arquero José Pablo Burtovoy, del club Colón de Santa Fe (Argentina). En abril de 1998, Colón se impuso en la tanda 2-1 al Olimpia de Asunción.
Los penales detenidos no fueron seguidos y Burtovoy contuvo cuatro. A raíz de esto al portero se le puso el apodo de Astroboy .
Luego hay más de nueve partidos por la Libertadores en que un golero paró tres penales, con la salvedad que el ecuatoriano José Francisco Cevallos lo hizo en dos ocasiones, en 1998 y en el 2008.