El 2013 fue un año de contrastes para Luis Suárez, quien cumplió el papel de héroe y villano con el Liverpol de la Liga Premier inglesa.
Su desempeño en la actual temporada es superlativo, un olfato goleador, de depredador en el área, con 19 tantos en 13 encuentros.
En la temporada anterior le tomó 28 juegos llegar a 19. En la antepasada solo marcó 11 goles.
La proyección que ha tenido el atacante charrúa desde que llegó del Ajax de Holanda en el 2011 es más que impresionante.
El uruguayo es el dueño de la pelota en Anfield Road, cobra los tiros libres, los saques de esquina y los lanzamientos de penal.
Creó 38 oportunidades de gol durante la temporada para los Reds .
Además ya se consagró en su estadio, a la vista de toda su afición, sobre todo en los partidos contra en el Norwich City y el West Bromwich, en los que concretó cuatro y tres anotaciones, respectivamente.
Sobra decir que el uruguayo no juega en la posición de típico “9”,sino que acecha fuera del área, él corre, mete cuerpo, reclama (bastante) y además tiene una actitud que contagia a todo el equipo.
Una carrera brillante que ha sido manchada por la actitud irreverente del jugador, hay que recordar que en el certamen anterior fue suspendido 10 juegos por morder al lateral del Chelsea Ivanovic.
Motivo por el cual, el “7” del Liverpool se perdió los primeros seis encuentros de la temporada.
Con el uruguayo en forma, el Liverpool está en el cuarto lugar de la tabla, a tres puntos del líder, y ya sueña con lograr su primer título de la Liga Premier, que se fundó 1992.
En la ciudad están enamorados del uruguayo, de sus goles, de su actitud, por lo que no dudaron en extenderle el contrato por cuatro años más, por una sustancial suma de $ 310.000 semanales.
Lo cual es una sorpresa, pues cuatro meses atrás, Suárez había declarado públicamente que quería abandonar las filas de los Reds para incorporarse a otro equipo.
Por lo tanto, varios medios británicos lo colocan como uno de los mejores pagados de Anfield.
Mientras tanto Luis continua con su cosecha de tantos, haciendo estallar todo Liverpool.
El uruguayo los celebra dándose tres besos en la mano, dos para sus hijos, Benjamín y Delfina.
El último para su esposa Sofía Balbi, a la que le prometió cuando se ennoviaron a los 15 años que él iba a ser jugador profesional de fútbol y que nunca más tendrían que preocuparse por el dinero.
Clave con la Celeste. El olfato goleador de Lucho, fue fundamental en la clasificación de Uruguay a la Copa del Mundo de Brasil 2014.
En los 16 partidos disputados por la Celeste en la Conmebol, Luis marcó 11 anotaciones,que lo llevaron a convertirse en el goleador de la eliminatoria, un tanto por arriba del argentino Lionel Messi.
Eventualmente Costa Rica jugará contra él en el Mundial, en el primer partido de la Tricolor en Brasil, el 14 de junio del 2014.